MADRID 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional (AI) ha calificado este viernes de "cínica" la oposición de Irán, Corea del Norte y Siria al Tratado de Comercio de Armas, por el que se pretende prohibir la venta de armas a los Estados "acusados de genocidio y crímenes de guerra y contra la Humanidad", y ha recordado que el objetivo del proyecto es evitar, "precisamente", las "atrocidades" cometidas en estos tres países.
La votación prevista para la noche del jueves en la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Tratado de Comercio de Armas fue aplazada a causa de las objeciones presentadas por Corea del Norte, Siria e Irán, que denunciaron que el texto no contempla la prohibición de la venta de material bélico a grupos rebeldes, como ocurre en el caso de los insurgentes sirios.
Según los representantes de AI en la Conferencia, celebrada en Nueva York, "estos tres países han sido sometidos a distintos tipos de sanciones, incluido el embargo de armas, y presentan un pésimo historial en materia de Derechos Humanos e incluso han utilizado sus armas contra sus propios ciudadanos". "Las atrocidades que han cometido son, precisamente, las que el proyecto de tratado pretende evitar", ha agregado la organización en un comunicado.
El tratado, de aprobarse, obligaría a todos los Gobiernos a asegurarse que la transferencia de armas, municiones o componentes a otros países no contribuye a la perpetración de graves violaciones del Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional sobre Derechos Humanos. En caso de detectarse un riesgo real, los Estados deben anular cualquier venta de armas.
ASAMBLEA GENERAL
El veto de Irán, Siria y Corea del Norte no impedirá por sí mismo la aprobación del tratado, ya que, tal como ha recordado AI, la resolución que ha permitido la reunión de Nueva York establece que, a falta de consenso entre los Estados, el presidente de la propia Conferencia de Naciones Unidas para el Tratado de Comercio de Armas, el australiano Peter Woolcott, tendrá atribuciones para remitir el texto a la Asamblea General de la ONU.
Esta segunda opción, que había apoyado Kenia "en nombre de once Estados importantes", permitirá casi con toda probabilidad la adopción del tratado el próximo martes, en el actual periodo de sesiones de la Asamblea General.
En todo caso, "la decisión de Irán, Corea del Norte y Siria de impedir su aprobación unánime en la conferencia es inconcebible", ha denunciado el director de Control de Armas y Derechos Humanos de Amnistía Internacional, Brian Wood, quien se encuentra actualmente en Nueva York.
"El veto de Irán, Corea del Norte y Siria a este histórico documento es un indicador de los escollos a que se han enfrentado tanto la sociedad civil como los Gobiernos que apoyan este tratado durante las negociaciones", ha declarado la subdirectora sobre Derecho Internacional y Política de Amnistía Internacional, Widney Brown.
"Durante las campañas en favor de este tratado, hemos reclamado a los Estados que salven vidas y reduzcan el sufrimiento humano y, afortunadamente, la mayoría de los Gobiernos han escuchado este llamamiento", ha añadido.
No obstante, y "a pesar del apoyo generalizado al tratado", algunos Estados "siguen recurriendo a los altos intereses económicos, al ejercicio de sus poderes políticos e incluso a las reclamaciones de soberanía para justificar actos evidentemente reprensibles, como los ataques y homicidios contra sus propios ciudadanos", ha denunciado AI.