Argentina.- La primera dama argentina asegura que Latinoamérica actuarán de modo firme contra el antisemitismo

CARACAS, 25 Mar. (EP/AP) -

La senadora y primera dama argentina, Cristina Fernández de Kirchner, aseguró este sábado en Caracas que los líderes latinoamericanos actuarán contra cualquier signo de antisemitismo, en el discurso de orden que pronunció con motivo del 40 aniversario de la Confederación de Asociaciones Israelitas de Venezuela (CAIV).

"Tenga usted la certeza de que todos y cada uno de los hombres que tenemos responsabilidades institucionales en Latinoamérica levantaremos no solamente nuestra voz sino nuestra acción concreta ante cualquier signo o atisbo de antisemitismo", proclamó Fernández en respuesta a los temores expresados por el presidente de la CAIV, Freddy Pressner, en su discurso.

"Hoy hemos sentido un halo de intranquilidad, una preocupación que no debemos ocultar, promovida por manifestaciones propiamente antisemitas, divulgadas por negadores del holocausto", apuntó Pressner, en una referencia velada al presidente de Irán, Mahmoud Ahmadineyad.

La primera dama de Argentina --donde reside la mayor comunidad judía fuera de Israel-- le pidió que se desterrasen los temores. "No tenga miedo, que esta Latinoamérica tiene una larga tradición de respeto y de convivencia absoluta entre distintas nacionalidades, entre distintas religiones", dijo.

"Afortunadamente, no son los problemas étnicos ni religiosos los que sacuden nuestra región, tenemos otras vergüenzas... ser el continente más injusto, donde la brecha entre pobres y ricos --no la pobreza, la brecha-- es la más profunda de todos los continentes", añadió.

Fernández habló en un acto al que asistieron representantes de la comunidad judía del continente, además de figuras políticas y diplomáticas destacadas de Venezuela.

"Siempre he admirado, casi le diría que he envidiado, la terquedad histórica del pueblo judío por el honor que hacen de la memoria, hacen de la justicia una tradición", dijo Fernández antes de asegurar que aceptar la invitación fue "un inmenso honor".