Los aspirantes a presidir la Comisión avisan en el segundo debate televisado de que no aceptarán un candidato tapado

Europa Press Internacional
Actualizado: viernes, 9 mayo 2014 20:29

Juncker, Schulz, Verhofstadt y Bové piden endurecer las sanciones contra Rusia

FLORENCIA (ITALIA), 9 (EUROPA PRESS)

Los aspirantes de los principales grupos políticos europeos a presidir la Comisión tras las elecciones a la Eurocámara tras las elecciones del próximo 25 de mayo han avisado este viernes -durante el segundo debate televisado de la campaña- a los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintiocho de que no aceptarán que a última hora se les imponga un candidato tapado.

El previsible choque entre la Eurocámara y los líderes europeos por la presidencia de la Comisión, la política económica de la UE y la crisis por la intervención de Rusia en Ucrania han centrado este segundo debate, en inglés y transmitido por la cadena italiana RAI desde Florencia.

En él han participado el aspirante conservador, el luxemburgués Jean-Claude Juncker; el socialista, el alemán Martin Schulz; el liberal, el belga Guy Verhofstadt; y el candidato verde, el francés José Bové. El único ausente ha sido el representante de Izquierda Unitaria, el griego Alexis Tsipras, que sólo participará en el último debate que se celebra el 15 de mayo en Bruselas.

Juncker ha dicho que estaría "muy descontento" si los líderes europeos ignoran a los aspirantes declarados y acaban nombrando a un candidato tapado. "Si lo hacen, abrirán el camino a una gran crisis institucional entre el Parlamento y los Gobiernos", ha avisado. A su juicio, el partido que gane las elecciones del 25 de mayo -que según las últimas proyecciones sería el PPE, aunque por escaso margen- tiene derecho a proponer a su candidato.

Por su parte, Schulz ha indicado que el nombramiento de un candidato tapado provocaría un "gran daño" a la democracia europea y se ha mostrado convencido de que "el Parlamento no votará esa propuesta". "No debemos aceptar a nadie de fuera de la lista de candidatos, sería el fin de la democracia europea", ha abundado el candidato liberal. A juicio de Verhofstadt, el futuro presidente de la Comisión no será el del partido que gane las elecciones sino el del que consiga construir una mayoría en la Eurocámara.

Bové ha pedido a los líderes europeos que "sean cuidadosos con lo que van a hacer" porque ignorar a los candidatos declarados sería "muy peligroso para la democracia en Europa". Los cuatro candidatos han coincidido en que la baja participación en las elecciones europeas no puede utilizarse como excusa para imponer a un candidato tapado. "Es un argumento extraño de la gente que quiere continuar dirigiendo la UE a puerta cerrada, sin ninguna influencia de los ciudadanos", ha dicho el candidato socialista.

Según el Tratado de Lisboa, los líderes europeos deben elegir al próximo presidente de la Comisión "teniendo en cuenta" el resultado de las elecciones europeas. Por ello, los principales grupos políticos han decidido por primera vez nombrar a sus candidatos. Pero el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha expresado sus dudas sobre este sistema y no está claro que los líderes europeos vayan a aceptar a los aspirantes propuestos.

RESPETAR EL LÍMITE DEL 3% DE DÉFICIT

En materia de política económica, los cuatro candidatos han coincidido en que el límite de 3% de déficit recogido en el Pacto de Estabilidad debe respetarse, aunque Schulz y Bové han insistido en la necesidad de invertir a escala de la UE para impulsar el crecimiento y el empleo.

Juncker, que presidió el Eurogrupo durante la crisis de deuda, ha dicho que "no daría más flexibilidad" ni a Francia ni a Italia porque a su juicio el crecimiento no puede basarse en la deuda. También Verhofstadt ha dicho que "no es serio" dar más tiempo a los países para cumplir los objetivos de déficit.

En contraste, el candidato socialista ha admitido que "el criterio del 3% está en el Tratado, no vamos a cambiarlo y debe respetarse" pero ha reclamado que se flexibilicen los plazos si es necesario y ha pedido diferenciar entre inversión y gasto corriente. Y Bové ha dicho que el criterio del 3% "sólo es aceptable" si se combina con un plan de estímulo europeo liderado por el Banco Europeo de Inversiones.

MÁS SANCIONES A RUSIA

Todos los candidatos se han mostrado partidarios de endurecer las sanciones contra Rusia por su intervención en Ucrania, pero han insistido también en la necesidad de privilegiar la vía diplomática para resolver el conflicto. "Sanciones sí si son necesarias", ha dicho Schulz, "pero también hay que buscar soluciones diplomáticas".

"Estoy a favor de sanciones más fuertes. No sanciones económicas, porque llevaría tres años acordarlas en la UE, sino sanciones personales que afecten al círculo íntimo de Putin, los oligarcas", ha defendido por su parte el candidato liberal, que ha recibido el apoyo de Bové.

Por su parte, Juncker ha endurecido su postura y ha dicho que "si Putin no cambia su comportamiento tenemos que acelerar las sanciones económicas", aunque ha pedido un mecanismo de solidaridad porque estas medidas afectarán de diferente manera a cada Estado miembro.

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