KABUL, 23 May. (Reuters/EP) -
Las luchas por el poder entre las facciones rivales de los talibán aumentarán tras la muerte de su líder, el mulá Mansur, lo cual podría desencadenar una nueva ola de atentados, ha advertido este lunes el gobernador de la provincia afgana de Balj, Atta Mohamad Noor.
"La lucha probablemente aumentará en algunas zonas del país después de la muerte del líder talibán, como una forma de restar importancia a esta pérdida", ha dicho Noor en una entrevista concedida a la agencia de noticias Reuters.
El líder regional ha apuntado a una posible oleada de atentados suicidas como la que el año pasado permitió brevemente la caída de Kunduz, que se convirtió en la primera capital provincial capturada por los talibán en más de una década.
Interrogado sobre las perspectivas del diálogo de paz, Noor, ex comandante de los muyahidines que lucharon primero contra los soviéticos y después contra los talibán, se ha mostrado escéptico, aunque ha admitido que el Gobierno podría aprovechar la fractura en la insurgencia.
La muerte de Mansur, a causa de un ataque de un 'drone' estadounidense, abre ahora una sucesión que enfrentará a Sirajuddin Haqqani, jefe de esta red terrorista, y a Mohammad Yaqoob, hijo del fundador de los talibán, el fallecido mulá Omar.
Balj, otrora considerada una de las provincias más seguras de Afganistán, sufre ahora un repunte de la violencia a causa de la presencia de milicianos del Estado Islámico.
