Bahréin.- El Gobierno recibirá desde la próxima semana las solicitudes de compensación de las víctimas de las protestas

PEKÍN 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio de Justicia de Bahréin comenzará a recibir a partir de la próxima semana las solicitudes de compensación de las personas que se vieron afectadas por las protestas que vivió la isla el año pasado, incluidas las víctimas de la represión de las fuerzas de seguridad, según ha anunciado este miércoles la Autoridad de Asuntos de Información (IAA) bahreiní.

Según este organismo, desde el próximo domingo el Ministerio de Justicia y Asuntos Islámicos aceptará los recursos en el marco de la Iniciativa de Arreglo Civil adoptada en línea con las recomendaciones realizadas al Gobierno por la Comisión Independiente de Investigación bahreiní (BICI), que investigó los acontecimientos del año pasado y concluyó que al menos 35 personas murieron por la represión de las protestas contra el régimen de los Al Jalifa.

"Los beneficiarios de la iniciativa incluyen a las familias de los fallecidos, los heridos o los que sufrieron abusos, junto con otros casos considerados válidos para el arreglo en función de las circunstancias de cada uno de ellos", ha explicado la IAA, según recoge la agencia china Xinhua.

La IAA ha subrayado que la Iniciativa de Arreglo Civil no excluye el derecho de las víctimas a proseguir acciones por la vía judicial. Las víctimas serán compensadas en base a las investigaciones que llevará a cabo un equipo designado por el Ministerio de Justicia.

El ministro de Justicia, el jeque Jalid bin Ali al Jalifa, ha destacado que las compensaciones beneficiarán a las familias de los fallecidos así como de aquellos que resultaron heridos. "También incluirá a todos aquellos a los que el informe de la BICI considera afectados, incluidos los miembros de las fuerzas de seguridad que murieron en el ejercicio de sus funciones", ha precisado.

Bahréin vivió entre febrero y marzo del año pasado una ola de protestas, protagonizadas principalmente por la mayoría chií de la isla, para reclamar reformas democráticas a la monarquía que encabeza la familia Al Jalifa, suní. El Gobierno respondió con la fuerza y logró restablecer el orden con el apoyo de fuerzas saudíes y emiratíes.

Desde entonces, activistas de Derechos Humanos han denunciado la muerte de varias personas bajo custodia y en algunas manifestaciones posteriores como consecuencia de la actuación de las fuerzas de seguridad, a las que la BICI, una comisión independiente designada por el rey de la isla, acusó de haber cometido abusos en los hechos del año pasado.