Al Wefaq denuncia agresiones de la Policía durante una marcha en honor al joven muerto la semana pasada

Actualizado: miércoles, 20 febrero 2013 6:53

MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El partido opositor bahreiní Al Wefaq ha denunciado este martes agresiones por parte de las fuerzas de seguridad contra los participantes en una marcha convocada en recuerdo de Hussein Jaziri, el joven de 16 años que murió la semana pasada a manos de la Policía del país durante una manifestación.

"Las fuerzas (de seguridad) han asaltado a los participantes sin previo aviso cuando se dirigían al cementerio para visitar la tumba del mártir", ha indicado la formación a través de un comunicado.

Al Wefaq ha manifestado que en la operación han participado "gran cantidad de fuerzas del régimen", así como "vehículos blindados". Durante el asalto, la Policía "ha usado gases tóxicos --en referencia a los gases lacrimógenos-- y ha apuntado con sus armas directamente contra los cuerpos de los ciudadanos, dejando varios heridos".

Asimismo, ha denunciado que las fuerzas de seguridad han utilizado gases lacrimógenos de forma "extensiva y deliberada" contra las viviendas de los alrededores. Desde el inicio de las manifestaciones contra el Gobierno en marzo de 2011, varias decenas de personas han muerto a causa de la inhalación de estos gases.

Por su parte, la agencia estatal bahreiní de noticias, BNA, ha señalado que las fuerzas de seguridad han intervenido para "dispersar a un grupo de saboteadores que sembraron el caos tras velar a un alborotador fallecido en Al Daih".

"Los matones atacaron varias instalaciones públicas y bloquearon la carretera Budaiya con farolas, rocas y contenedores de basura antes de prenderles fuego", ha dicho. Asimismo, ha puntualizado que varios "terroristas" lanzaron cócteles molotov y piedras contra las fuerzas de seguridad.

Desde el inicio del levantamiento, el Gobierno bahreiní se ha referido a los manifestantes como alborotadores y ha acusado de terrorismo y de pertenencia a banda armada a algunos de los participantes en los enfrentamientos con la Policía. En algunos casos, estas acusaciones se basan en la fabricación y uso de cócteles molotov.

El emirato, aliado de Estados Unidos y las monarquías del Golfo, ha reprimido violentamente durante el último año las protestas pro democráticas en el territorio. Manama ha impuesto la ley marcial y ha pedido la entrada de tropas saudíes y emiratíes para controlar las protestas y aplastar las manifestaciones.

La oposición ha denunciado en reiteradas ocasiones las medidas violentas utilizadas por las fuerzas de seguridad y ha afirmado que han fallecido más de 80 personas desde el inicio de las protestas, la mayoría de ellas por gases lacrimógenos y atropellos de vehículos policiales.

Asimismo, desde el inicio de la represión de las autoridades contra los manifestantes, ONG internacionales como Amnistía Internacional (AI), Human Rights Watch (HRW) o Reporteros Sin Fronteras(RSF) han emitido múltiples comunicados para denunciar la situación de Derechos Humanos en el país y pedir a la comunidad internacional una postura activa de presión sobre el Ejecutivo.

En enero, el monarca, Hamad bin Isa al Jalifa, hizo una propuesta de diálogo a la oposición, que respondió que la misma "es vaga y está cubierta de niebla", al tiempo que destacó que "no refleja un acercamiento real y serio para responder a las demandas de la población".

El anterior proceso de diálogo para intentar poner fin a la crisis política en Bahréin concluyó en julio de 2012 sin alcanzar ningún acuerdo por la retirada del principal grupo de la oposición, Al Wefaq, que denunció que estaba infrarrepresentado en la mesa de diálogo.