MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional (AI) denunció hoy que seis personas, entre ellas tres destacados activistas, fueron detenidas en la madrugada del pasado 13 de octubre en la principal ciudad de Birmania, Rangún, "en el contexto de la continua campaña de represión que llevan a cabo las autoridades militares".
Se cree que los tres activistas --Htay Kywe, Mie Mie (también conocida como Thin Thin Aye) y Aung Thu-- figuraban entre los últimos miembros destacados del Grupo de Estudiantes Generación del 88 que aún no habían sido capturados.
No se sabe dónde permanecen recluidos y se teme seriamente por la seguridad de los seis, "pues todos corren un grave peligro de ser sometidos a tortura y malos tratos", según AI, que añadió que, según informes, el estado de salud de Htay Kywe es precario.
Según informaciones de un testigo presencial citadas por Amnistía, unos 70 miembros de las fuerzas de seguridad irrumpieron en la casa en la que se escondían las seis personas. Además de los tres activistas, fueron detenidos otros dos miembros del Grupo de Estudiantes Generación del 88 --Zaw Htet Ko Ko, de 26 años, y Hein Htet, también conocido como Aung Gyi-- y el propietario de la casa.
Htay Kywe, Mie Mie y Aung Thu habían participado en las primeras manifestaciones de protesta en agosto, pero pronto se vieron obligados a pasar a la clandestinidad cuando las autoridades comenzaron a perseguir a todas las personas a las que percibían como líderes de las protestas, en especial, a Htay Kywe. El 21 de agosto, 13 importantes activistas del Grupo de Estudiantes Generación del 88 fueron detenidos durante una operación nocturna.
Poco antes de su detención, Htay Kywe dijo desde la clandestinidad que "la comunidad internacional debe adoptar una postura firme y clara para impedir que se cometan más violaciones de derechos humanos" y pidió a la comunidad internacional "que preste la máxima ayuda posible" para lograrlo.
CIFRA DE DETENIDOS
Según Amnistía, la cifra real de personas detenidas sigue sin conocerse, y las autoridades de Birmania tampoco han facilitado información acerca de la identidad de los detenidos, el lugar donde permanecen recluidos y en qué condiciones y por qué se les ha detenido.
Los medios de comunicación estatales de Birmania han indicado que la cifra de detenidos superaba con creces las 2.000 personas, pero los datos, incluidos los relativos a excarcelaciones, "no coinciden con los que el representante birmano presentó ante el Consejo de Seguridad de la ONU el pasado viernes 5 de octubre", advirtió Amnistía.
Asimismo, la prensa estatal ha advertido de que las personas detenidas durante las manifestaciones pueden ser condenadas a penas de prisión. El 'New Light of Myanmar' afirmó hoy que "cualquier persona detenida por haber violado la ley será acusada y cumplirá una pena de prisión si es declarada culpable".
Por otra parte, prosiguió Amnistía, continúan recibiéndose preocupantes informes de registros, vigilancia y acoso de personas que tomaron parte en las manifestaciones. Según los informes, familiares y vecinos de presuntos manifestantes también están recibiendo amenazas.
La Asociación de Ayuda a los Presos Políticos, con sede en Tailandia, ha informado de que un detenido, miembro del principal partido de la oposición, la Liga Nacional para la Democracia, murió como consecuencia de la tortura durante su interrogatorio. Según los informes, Ko Win Shwe, de 42 años, había sido detenido junto a otras cuatro personas el 26 de septiembre debido a su participación en las manifestaciones.
