SAO PAULO, 10 Nov. (EP/AP) -
El descubrimiento de un gigantesco yacimiento petrolífero podría convertir a Brasil en uno de los principales exportadores de petróleo del mundo, aunque del pleno desarrollo de esa zona seguramente no ocurrirá antes de 2013 y costará mucho dinero.
El yacimiento "ultraprofundo" de Tupi, situado frente a la costa de Río de Janeiro, podría contener 8.000 millones de barriles de crudo recuperable de bajo contenido sulfuroso, y la producción inicial debería superar los 100.000 barriles diarios, según el director de exploración y producción del ente brasileño estatal Petróleo Brasileiro SA, Guilherme Estrella.
Petrobras comenzará un programa piloto de bombeo en 2010 o 2011 pero la plena producción se demorará varios años más, indicó Estrella. Tras subir un 26% ayer en Nueva York tras el anuncio del descubrimiento, las acciones de Petrobras bajaron un 2,1% a primeras horas de hoy viernes.
Empero, la extracción de ese crudo será costosa y un enorme desafío debido a la profundidad del yacimiento, superior a los 7.000 metros (casi 23.000 pies). El lapso que transcurrirá antes de la plena explotación significa que su impacto en el mercado mundial tardará mucho en sentirse. La explotación del yacimiento de Tupi costará miles de millones de dólares, pero Petrobras tiene cuantiosas reservas monetarias debido a su creciente producción y los elevados precios del crudo.
El yacimiento de Tupi se encuentra a 2.140 metros bajo el agua, después se encuentran más de 3.000 metros de arena y roca, y luego otros 2.000 metros de sal. La empresa perforó pozos de prueba bajo unos 2.166 metros de agua, a 286 kilómetros al sur de Río de Janeiro.
