BRUSELAS, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha lanzado este viernes dos consultas públicas para recabar la opinión de los Gobiernos, expertos, la industria, la sociedad civil y otras partes interesadas de aquí hasta el próximo 14 de junio sobre el ámbito de competencia de la UE para proteger la libertad y el pluralismo de los medios de comunicación en el conjunto de Estados miembros y la independencia de los reguladores de los medios audiovisuales.
Bruselas ha decidido lanzar las consultas públicas después de que el Grupo de Alto Nivel en apoyo a la Libertad de Prensa creado en 2011 por la vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Agenda Digital, Neelie Kroes, para examinar las legislaciones nacionales en materia de medios de comunicación presentara sus recomendaciones en enero de este año.
El Grupo, presidido por la expresidenta de Letonia, Vaira Vike-Freiberga, recomendó entre otros dar a Bruselas más poder para controlar los órganos de autorregulación de la prensa de cada país y asegurar así que se cumple con los valores europeos y garantizar organismos reguladores independientes en el sector audiovisual.
Kroes ha admitido este viernes que "en la UE nos enfrentamos a amenazas para las libertades fundamentales, como la libertad y el pluralismo de los medios de comunicación en Europa" y ha recordado que el grupo de expertos creado por ella "envió una señal clara" sobre la necesidad de "actuar para garantizar la libertad y el pluralismo de nuestros medios de comunicación en el futuro".
La vicepresidenta ha animado a participar en las consultas tras recordar que "el pluralismo de los medios de comunicación una parte importante de la democracia".
Con la primera consulta, el Ejecutivo comunitario quiere determinar si existe un respaldo amplio para actuar a escala europea o nacional en ámbitos cubiertos por los Tratados de la UE para proteger la libertad y pluralismo de medios y con la segunda consulta pretende sondear si hay apoyo para aplicar la recomendación del grupo de alto nivel sobre la necesidad de garantizar que los reguladores del sector audiovisual sean organismos independientes y si es preciso modificar la Directiva sobre Servicios de Comunicación Audioviual.