SRINAGAR (INDIA), 18 (EP/AP)
Al menos una persona murió en la tarde de ayer, y otras 16 resultaron heridas por el impacto de una granada lanzada por presuntos rebeldes islámicos en un mercado de Baltal, cercano a un campamento donde se alojan los peregrinos hindúes que visitan la capilla de la cueva de Amarnath, en la región india de Cachemira, según informó el jefe de la Policía, Farooq Ahmed.
Ahmed indicó que al menos 17 personas, incluidos cuatro peregrinos, resultaron heridos en el ataque. Ocho de las víctimas fueron trasladados en estado crítico a un hospital de Srinagar (capital de la zona india de Cachemira, el Estado de Jammu-Kashmir, a 110 kilómetros al sureste del lugar del atentado), más tarde uno de ellos murió, pero no se conoce si el fallecido era o no un peregrino.
Aún no se ha responsabilizado a ningún grupo del ataque de Baltal pero los ataques de los separatistas islámicos tuvieron como objetivo a los peregrinos en el pasado, ya que la mayoría hindú suele usar el peregrinaje religioso anual como una declaración política para reclamar la región del Himalaya, que se encuentra dividida entre Pakistán e India y que ambos países reclaman de forma completa.
Fuentes oficiales adviertes de que se espera que unos 400.000 devotos visiten el santuario de Amarnath, en una cueva del Himalaya, que permanece abierto a los visitantes sólo dos meses y donde se encuentra una estalagmita santa que los hindúes veneran como una reencarnación del dios Shiva, el dios de la destrucción y la regeneración. Cientos de soldados han sido desplegados a lo largo de la ruta de peregrinaje.
Sobre una decena de grupos de milicianos llevan luchando en la región desde 1989 en un intento de conseguir la independencia de Cachemira, de mayoría musulmana, o su unión con la vecina Pakistán. Al menos 68.000 personas han muerto durante el conflicto.