MBANGA-PONGO, 7 May. (EP/AP) -
Las autoridades camerunesas confirmaron hoy que ninguno de los 114 pasajeros y tripulantes del avión de la compañía Kenya Airways siniestrado el pasado sábado en Camerún ha logrado sobrevivir al accidente.
Un funcionario del Gobierno local camerunés, Luc Ndjodo, confirmó la noticia tras visitar el cráter en el que se estrelló el aparato, ahora cubierto de agua. La zona del accidente es pantanosa y su densa vegetación, la niebla y la lluvia dificultan enormemente las labores de rescate.
El agujero provocado por el impacto de avión es del tamaño de un campo de fútbol, aseguró Ndjodo. "Estuve allí. No vi a nadie", declaró.
En el agua que rellenó inmediatamente el lugar en el que impactó el avión tenía pedazos de plástico y otros materiales frotando. Los servicios de rescate trabajan ya con una manguera para bombear el agua que inundó los restos del aparato. "Asumimos que hay partes grandes del avión bajo el agua. Yo sólo pude ver piezas", explicó Ndjodo.
Mientras, los equipos de rescate, formados por militares y voluntarios de las aldeas de los alrededores, colocaban los restos humanos y en camillas para trasladarlos a las ambulancias desplazadas hasta el lugar más cercano al que podían acceder, situado a unos 20 minutos a pie del lugar del siniestro.
El jefe de Meteorología del aeropuerto de Douala, Thomas Sobakam, explicó que el avión seguramente impactó en picado en el pantano y se desintegró por el fuerte impacto. "El avión calló de punta. Su parte delantera impactó contra en el manglar y se sumergió en el pantano", reveló Sobakam.
Las malas condiciones meteorológicas impidieron que el lugar exacto donde se encontraba el fuselaje fuera localizado hasta la tarde de ayer, a pesar de que se perdió el contacto con el aparato entre 11 y 13 minutos después de que despegara del aeropuerto de Douala, capital económica de Camerún, a las 12:05 horas del sábado (13:05 hora peninsular española). Los restos fueron finalmente hallados a unos 20 kilómetros de Douala.
El aparato, un Boeing 737-800 de la compañía Kenya Airways con base en Nairobi, despegó de Douala a primera hora del sábado con condiciones meteorológicas tormentosas, 105 pasajeros y nueve tripulantes a bordo.
En el avión había ciudadanos de 27 nacionalidades distintas, 37 de Camerún, 15 de India, 7 de Sudáfrica, 6 de Costa de Marfil, 6 de Nigeria, 5 de China, 5 de Reino Unid, 3 de Níger, 2 de República Centroafricana, 2 de Guinea Ecuatorial, 2 de la República Democrática del Congo, 1 de Mauritania, 1 de Corea del Sur, 1 de Suiza, 1 de Malí, 1 de Togo, 1 de Suecia, 1 de Ghana, 1 de las Islas Comoras, 1 de Mauricio, 1 de Senegal, 1 de Congo, 1 de Egipto, 1 de Tanzania, 1 de Estados Unidos, 1 de Burkina Faso y 9 de Kenia, informó la propia compañía.
