MADRID, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
Alrededor del 25 por ciento de los niños palestinos de 15 años no acuden a la escuela, una cifra que es del siete por ciento en el caso de las niñas, según ha informado este jueves el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en un informe.
El estudio 'Estado de Palestina: Informe de país sobre los niños que no asisten a la escuela' refleja que la mayoría de ellos abandonan la escuela debido a la baja calidad de la educación, la violencia física y emocional en las escuelas y el conflicto.
Así, destaca que los adolescentes de 14 y 15 años constituyen cerca de la mitad de todos los niños que no asisten a la escuela hasta la edad obligatoria, de 15 años en el caso de Palestina.
Asimismo, apunta que un total del 18,3 por ciento de niños de esa edad residentes en Cisjordania no acuden a la escuela, una cifra mayor al 14,7 por ciento registrado en el caso de la Franja de Gaza.
"Llegar a los niños que corren el mayor riesgo de abandonar la escuela, como los adolescentes, y abordar los problemas que enfrentan antes de que sea demasiado tarde, es fundamental para mantenerlos en clase", ha manifestado Genevieve Boutin, representante especial de UNICEF en el Estado de Palestina.
"Crear empleos para jóvenes graduados también es una prioridad, especialmente en la Franja de Gaza, donde más del 60 por ciento de los jóvenes están desempleados", ha agregado.
En este sentido, el informe recalca que una mejor educación y una oferta de servicios de apoyo, incluido un plan de estudios flexible, diferentes tipos de oportunidades de refuerzo para el aprendizaje y tareas de asesoramiento, pueden ayudar a reducir el abandono escolar.
"El acceso a una educación de calidad en un entorno escolar seguro ayudará a todos los niños a permanecer en la escuela y desarrollar el conocimiento y las habilidades necesarias para progresar en la vida", ha manifestado Boutin.
OTROS PROBLEMAS A LOS QUE HACEN FRENTE
UNICEF ha indicado además que los estudiantes hacen frente a otros problemas a la hora de acceder a la escuela como llegar al centro educativo o la superpoblación de las clases.
Así, ha manifestado que "los niños a menudo se ven obligados a pasar por varios puestos de control, barricadas y rodear los asentamientos israelíes solo para llegar a clase", lo que "puede ser especialmente difícil para los adolescentes, ya que es más probable que sean detenidos e interrogados en el camino a la escuela".
En el caso de Gaza, ha resaltado que en las clases hay una media de 37 alumnos, mientras que en los inscritos en los grados 1º a 10º, alrededor del 90 por ciento van a escuelas de doble turno.
"Esto reduce las horas de aprendizaje y la capacidad de los maestros para apoyar adecuadamente a los niños, especialmente aquellos que tienen dificultades en el aprendizaje o el comportamiento", ha apuntado UNICEF.
Por ello, Boutin ha argumentado que "los niños que avanzan con más lentitud en clase tienen más probabilidades de abandonar y, por lo tanto, corren un mayor riesgo de abuso y explotación fuera de la escuela".
"Estar en la escuela no solo ayuda a los niños palestinos a aprender y desarrollarse, sino que también les proporciona estabilidad y habilidades para la vida que son particularmente importantes en un ambiente de tan alto estrés", ha explicado.
El informe recoge además los variados impactos de la violencia sobre la educación. De hecho, más de dos tercios de los niños de 1º a 10º grado han dicho haber estado expuestos a la violencia emocional y física en sus escuelas.
Asimismo, más de 29.000 niños interrumpieron su escolarización en 2017 en los 170 ataques y amenazas de ataques a escuelas, estudiantes o docentes que dificultan aún más la asistencia a la escuela, según los datos del organismo.
Por todo ello, UNICEF ha pedido "mejorar la calidad de la educación en las escuelas de bajo rendimiento académico" y "aumentar el acceso a servicios educativos personalizados, dentro y fuera de la escuela, incluidos programas de refuerzo y apoyo educativo durante todo el año".
En esta misma línea, ha abogado por "mejorar la capacitación y el apoyo técnico a los docentes para la educación inclusiva" y "dirigir y adaptar los servicios de apoyo dentro de la escuela y otros servicios, como asesoramiento, programas de asistencia social y servicios de salud".
Por último, ha solicitado "mejorar y ampliar los programas de prevención de la violencia en las escuelas, incluida la capacitación positiva en materia de disciplina para los docentes" y "proteger las escuelas de la violencia relacionada con el conflicto, incluidas las incursiones de las fuerzas de seguridad y militares".
