BEIJING, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades chinas han anunciado que reforzarán las medidas de seguridad durante los próximos días para garantizar que la población celebre tranquila y sin contratiempos el Nuevo Año Lunar, que se cumple el próximo domingo.
Para ello, el Ministerio de Seguridad Pública ha anunciado que incrementará el número de agentes en servicio en las calles encargados de vigilar que el lanzamiento de petardos y fuegos artificiales (una peligrosa afición china que fue prohibida durante años en algunas ciudades, como Beijing, pero que tuvo que ser autorizada nuevamente por el clamor popular), no provoque más accidentes de la cuenta.
Según los datos oficiales, el año pasado se produjeron durante las fiestas de Año Nuevo Chino un total de 6.057 accidentes relacionados con los fuegos artificiales y cohetes, a pesar del fuerte dispositivo de seguridad desplegado.
El dispositivo no se detendrá ahí, ya que en estas fechas los chinos, los más ahorradores del mundo, se gastan al menos el sueldo de un mes entre regalos y cenas y, algunos optan por hacer su agosto atracando a sus confiados conciudadanos a la puerta de bancos y cajeros.
Por esta razón, el Ministerio ha anunciado que habrá más patrullas y que policías de paisano vigilarán los bancos, y ha recomendado a estas entidades que refuercen también sus medidas de seguridad, contratando a más guardias.
"Nuestros agentes están pendientes de los delincuentes y pueden reconocerlos. Cuando los ratones empiecen a moverse, los gatos comenzarán a cazarlos", señaló, con esta tranquilizadora metáfora, uno de los portavoces del Ministerio, que agregó que numerosos policías se quedarán sin vacaciones, las más importantes para los chinos, para proteger a la ciudadanía.
