China.- Reporteros Sin Fronteras pide la liberación del periodista chino del 'New York Times'

Actualizado: jueves, 13 septiembre 2007 13:01

BEIJING, 13 Sep. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -

La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha solicitado hoy a las autoridades chinas, a través de un comunicado, la liberación del periodista chino Zhao Yan, colaborador del 'New York Times', cuya sentencia de tres años se cumple este sábado.

Hasta la fecha, Beijing se ha negado a aplicar a Zhao ningún tipo de reducción a una condena sobre cuya validez se duda desde diversas organizaciones pro-Derechos Humanos. "El Gobierno no mostró clemencia alguna hacia Zhao, que fue un chivo expiatorio en un asunto de Estado en el que no estaba implicado", señala RSF.

"Tras servir por completo su sentencia de tres años, primero en un centro de seguridad nacional y luego en una prisión, Zhao debería ver todos sus derechos restablecidos, incluido su derecho a trabajar como periodista", agrega la organización, que recuerdo que al menos 35 periodistas y 51 ciberdisidentes se encuentran encarcelados en el país asiático --calificado a menudo como "la mayor cárcel de periodistas del mundo"-- por ejercer su derecho a informar.

Zhao fue detenido en septiembre de 2004 bajo la acusación de haber divulgado "secretos de Estado", tras haber informado a 'New York Times', antes de que se hubiese anunciado públicamente, que el anterior presidente chino, Jiang Zemin, planeaba abandonar su último cargo de influencia.

El diario estadounidense negó repetidamente haber obtenido esa información de Zhao, por lo que el periodista finalmente no fue acusado de esre cargo, sino de un supuesto fraude que tenía como testigos a un funcionario público y su familia y sobre cuya credibilidad se dudaba. El juicio, además, se vio rodeado de numerosas irregularidades.

Antes de unirse a la plantilla del 'New York Times' como investigador, Zhao se había dado a conocer por sus artículos en la revista 'Zhongguo Gaige' ('China Reforma'), en los que denunciaba las penosas condiciones de los más de 20.000 campesinos de la provincia de Hebei desplazados por la construcción del embalse Taolinkou.