C.Marfil.- Gbagbo pide a los cascos azules que abandonen Costa de Marfil y anuncia que boicoteará la reunión de la ONU

PARIS 19 Sep. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Javier Gómez Muñoz) -

El presidente de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, propuso a los 11.000 soldados internacionales en misión de paz (7.000 cascos azules y 4.000 soldados franceses dentro de la operación Unicornio de la Unión Europea) que abandonen su territorio y anunció que boicoteará la reunión sobre el proceso de paz en su país, prevista para mañana en la ONU.

"Este país no es ni Liberia ni Somalia. Las instituciones funcionan. Si quieren irse (las tropas internacionales), que se vayan. No se lo he pedido, pero estoy reflexionando sobre un plan alternativo que propondré a la Unión Africana", declaró Gbagbo a 'Le Monde'.

Los soldados internacionales desplazados al país africano sirven de frontera de separación entre la mitad norte del país, controlada por tropas rebeldes, y la zona bajo mando del Gobierno de Gbagbo. La finalidad es evitar que estalle una guerra civil. "La situación actual, en la cual nos mantienen (cascoz azules y soldados de la UE) es peor que la guerra", añadió el dirigente africano.

Gbagbo anunció también que boicoteará una reunión internacional sobre Costa de Marfil prevista el miércoles en Nueva York, en la sede de la ONU, donde se desarrolla la 61 Asamblea General de Naciones Unidas.

El presidente protesta por la proposición del Grupo Internacional de Trabajo que supervisa el proceso de paz para que el primer ministro, Charles Konan Banny, aumente sus poderes respecto al presidente Gbagbo. "Son partidarios de uno de los bandos y se burlan de los marfileños. Su plan ha fracasado", zanjó el actual jefe de Estado.

El mandatario africano protestó por estar obligado a formar un Gobierno en el que se juntan líderes oficialistas, rebeldes y de la oposición "y privado de la autoridad del jefe de Estado". "El tiempo de las proposiciones y las negociaciones se ha acabado. Hice todo lo que me pidieron, y los rebeldes siguen sin desarmarse", añadió Gbagbo.