BOGOTÁ 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
La familia de Gildardo Andrés Taborda, fallecido en la noche del jueves en extrañas circunstancias en la base militar de Al Goral, en la península egipcia del Sinaí, sostiene que su muerte no fue accidental, sino que fue asesinado a tiros por uno de sus compañeros. Taborda participaba en la Fuerza Multinacional de Observadores, un contingente militar y civil desplegado en la frontera entre Egipto e Israel para garantizar el cumplimiento del acuerdo de paz de 1979.
La esposa de Taborda, Beatriz Melguizo, aseguró en declaraciones a Caracol Radio desde el municipio de Anorí, en Antioquia, haber recibido una llamada telefónica de un coronel desde la base de Al Goral en el que le explicaba que su marido recibió varios disparos de fusil de uno de sus compañeros. Taborda recibió varios balazos en la ingle y las piernas.
En un primer momento, el militar colombiano fue atendido en un centro médico del Sinaí, pero ante la gravedad de las heridas debido ser trasladado en helicóptero a un hospital de Israel, donde finalmente falleció por la pérdida de sangre.
Melguizo agregó que la versión del coronel que la telefoneó fue corroborada a través de un correo electrónico por otro soldado. Así, rechazó la hipótesis de la bala perdida y emplazó a los mandos de la Fuerza Multinacional de Observadores a aclarar los hechos.
El cadáver de Taborda será trasladado por el Ejército colombiano este domingo en helicóptero hasta el municipio de Anorí, donde será sepultado, explicó su esposa.