Crónica Abjazia.- Abjazia celebra elecciones parlamentarias ante la negativa georgiana a concesiones independentistas

Actualizado: sábado, 3 marzo 2007 13:28

La UE permanece a la espera de los informes de las ONG en el país para iniciar nuevos proyectos de cooperación

MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

Abjazia, la pequeña república independiente de facto respecto de Georgia, se prepara para celebrar mañana domingo las elecciones parlamentarias después de recibir el visto bueno de su Asamblea Nacional sobre la composición del Comité Electoral Central, un proceso que en ningún momento ha contado con la aprobación de Tiblisi, que siempre se ha negado a considerar a la pequeña región como una entidad separada, a pesar de que la UE podría intervenir en el proceso.

El Parlamento abjazio cuenta con 35 miembros que se eligen para desempeñar su cargo durante los próximos cinco años. Estos diputados son elegidos según votación secreta, representando cada uno a su distrito electoral en régimen igualitario. Todo ciudadano abjazio mayor de 25 años cualificado para participar en las elecciones puede presentarse al Parlamento. Es un proceso sencillo, pero es un proceso unilateral iniciado por los abjazios, algo que suele levantar las iras del presidente georgiano, Mijail Saakashvili.

UN LARGO CONFLICTO

Y es que el conflicto entre Georgia y Abjazia alcanzó su máximo exponente en la guerra de 1992-1993, que se inició con la abolición de la Constitución soviética en Georgia, la recuperación de la antigua Carta de Tiblisi, y la pérdida de autonomía de los abjazios.

El conflicto desembocó en fuertes combates, que estallaron entre el Ejército georgiano y las milicias abjazias en las cercanías de Sujumi, la capital. Tras la victoria inicial del Ejército georgiano, una confederación paramilitar acudió en ayuda de Abjazia. Durante los meses posteriores, tuvo lugar un genocidio étnico contra la población georgiana en la región, que fue masacrada o expulsada.

En la actualidad, Abjazia está organizada como un estado independiente, que sin embargo no es reconocido por ningún otro estado a nivel mundial. Las tropas de paz de la UNOMIG y de la CEI aún permanecen en Abjazia tratando de evitar una nueva escalada militar en contra de los georgianos que aún permanecen dentro del territorio. El Gobierno de Abjazia ha variado su postura desde un reconocimiento absoluto a su independencia hasta la integración como miembro asociado a la Federación Rusa, lo que no ha sido aceptado por esta última para evitar tensar aún más su situación con Georgia. De cualquier manera, muchos abjazios tienen ciudadanía rusa en la actualidad.

Abjazia insiste en que se reconozca su independencia, basándose en lo que considera el establecimiento de valores democráticos y la aplicación de la ley, pero la comunidad internacional estima de forma prácticamente unánime que sigue formando parte de Georgia. No opinan igual los 200.000 desplazados abjazios que viven en Tiblisi, en condiciones muy duras y prácticamente incapaces de desarrollar sus propios negocios o de enviar dinero a sus familias.

REPRESENTACIÓN MULTIÉTNICA

Por su parte, el presidente de Abjazia, Sergei Bagapash, pidió a todas las comunidades étnicas que participen en estas elecciones nominando cada una a sus propios candidatos. "Abjazia es un país multinacional, y los intereses de toda su población deben estar representados en el Parlamento", afirmó Bagapash el pasado miércoles, después de reunirse con varios intelectuales del país y miembros de ONG en Sujumi.

Según el presidente, la rama legislativa del Gobierno debe servir a los intereses de abjazios, rusos, armenios, georgianos, griegos y otros grupos étnicos resudentes en la República.

La prosperidad de la República, según el dirigente, se relaciona directamente con el "acuerdo social y la preservación del respeto mutuo que se dio desde el principio entre todas las comunidades". "No estamos construyendo un estado monoétnico, y ese hecho debe ser puesto en conocimiento de todos", declaró.

QUEJAS GEORGIANAS

El presidente de Georgia, Mijail Saakashvili, realizó el pasado lunes en Bruselas un encendido alegato en defensa de la integridad territorial de su país frente a las pretensiones independentistas de Abjazia y Osetia del Sur, y advirtió, en clara referencia al estatuto final de la provincia serbia de Kosovo, que "las soluciones unilaterales y erróneas" en un territorio de Europa pueden "causar problemas en muchos otros".

Saakashvili, que esta tarde se entrevistó en la sede del Consejo Europeo con el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y la Seguridad Común (PESC), Javier Solana, reaccionaba así al ser preguntado si temía que la separación de Kosovo abriera la puerta a otras secesiones.

Tras quejarse de que, en un territorio de 600.000 habitantes, un grupo de separatistas "con ayuda del exterior" expulsó a casi 500.000 personas y que aceptar esta premisa es tanto como aceptar que "la tradición democrática europea sea reemplazada por el mero canibalismo", garantizó que "ése no es el camino" y que "es algo que Georgia jamás aceptará".

"Ninguna persona civilizada en la comunidad internacional podría aceptarlo. Tan claro como ésto. No a expensas de la integridad territorial", insistió el presidente georgiano, que se mostró convencido de lograr su objetivo a base de "tiempo, perseverancia y consistencia".

APOYO DE LA UE

El pasado mes de enero, una delegación de representantes de la UE declaró al primer ministro abjazio, Alexandr Ankab, su intención de expandir su participación en el desarrollo de la democracia en el país.

La Comisión Europea ha declarado que los informes que obtengan de las ONG serán fundamentales a la hora de decidir nuevos proyectos en la región, según el director del Departamento de Relaciones Externas de la Comisión, Hugues Mingarelli.

El primer ministro abjazio afirmó que las ONG presentes en el país disfrutan de una "autoridad significativa en los círculos publicos y políticos" y que el Gobierno intenta "mantener un diálogo constante con sus miembros, que son "verdaderos expertos a la hora de contribuir a la construcción de una sociedad civilizada", dijo.

Además, Ankab señaló que las autoridades no están limitando en modo alguno la acción "independiente" de estas ONG. "Ni hay barreras legislativas, ni partidismos o deseguilibros en forma de 'fondos occidentales'", subrayó el primer ministro.