Chirac advierte a Turquía de que si no abre sus puertos a Chipre paralizará el proceso de adhesión
BRUSELAS, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los jefes de Estado y de Gobierno de los Veinticinco acordaron hoy que no impondrán más requisitos a los candidatos que quieran entrar en la Unión Europea, pero sí que analizarán su capacidad para acogerlos. Las conclusiones de la cumbre suponen una victoria parcial para países como Reino Unido o Suecia, que rechazaban introducir nuevos criterios para continuar con la ampliación; frente a Francia o Austria, que querían endurecer las condiciones de acceso, aunque ponen de relieve que los líderes europeos siguen divididos sobre la ampliación.
En su proyecto de conclusiones, la presidencia austriaca había propuesto incluir la palabra "criterio" para referirse a la capacidad de absorción de la UE respecto a nuevos países. Tras la discusión de los líderes europeos se suprimió esta palabra de las conclusiones finales. Pese a ello, el canciller Wolfgang Schuessel insistió en que la capacidad de absorción seguirá siendo una "condición" para futuras ampliaciones y ya no se tratará de una "frase política vaga" sino que la Comisión presentará un informe antes de finales de año para "definir concretamente lo que significa".
Por su parte, el presidente del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso, destacó que la UE mantendrá sus compromisos con los países candidatos, pero reconoció que hay que afrontar las "preocupaciones" de la opinión pública y por ello Bruselas presentará su informe sobre la capacidad de absorción. "Está claro que no se trata de un nuevo criterio para los países candidatos, si cumplen todos los criterios fijados en Copenhague (económicos y políticos) pueden ser miembros de la UE", dijo.
También el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recalcó que la capacidad de absorción "no es un criterio" ni un "tamiz". "El Consejo Europeo ha estimado conveniente que se produzca una evaluación del ritmo de la capacidad de absorción o asimilación de los países que tenemos en perspectiva para el buen funcionamiento de la UE", apuntó. Para Zapatero, la UE tiene más bien la obligación de adaptarse a las nuevas ampliaciones.
El presidente francés, Jacques Chirac, dejó claro que el debate sobre la capacidad de absorción no implica modificar las condiciones de entrada de nuevos socios. "La absorción no afecta a los criterios de Copenhague, que siguen siendo los mismos", dijo. Chirac recordó que Europa debe implantar "la paz, la democracia, el desarrollo y la estabilidad" en un territorio lo más amplio posible, pero que, al mismo tiempo, debe tener en cuenta la capacidad de absorción "política, financiera e institucional" algo que, a su juicio, no cuestiona los principios de la ampliación.
La declaración aprobada por los Veinticinco señala que la UE cumplirá los compromisos existentes y pone de relieve que debe hacerse todo lo posible para preservar la cohesión y la eficacia de la Unión, pero sostiene que "en el futuro será importante asegurarse de que la Unión pueda funcionar política, financiera e institucionalmente a medida que se amplía, y profundizar más en el proyecto común de Europa".
Por ello, se mantendrá en diciembre de este año un debate sobre los aspectos de posteriores ampliaciones, "incluida la capacidad de la Unión Europea de absorber a nuevos miembros y nuevas maneras de mejorar la calidad del proceso de ampliación, basándose en las experiencias positivas acumuladas hasta ahora".
"A este respecto se recuerda que el ritmo de la ampliación debe tener en cuenta la capacidad de absorción de la Unión", agrega el documento en el que se pide a la Comisión elaborar un informe sobre los aspectos relacionados con el "criterio de capacidad de asimilación".
Este análisis específico debería abarcar también "la impresión actual y futura" que tienen de la ampliación los ciudadanos y tener en cuenta la necesidad de explicar adecuadamente el proceso de ampliación
EL CASO DE TURQUÍA
El debate sobre la capacidad de absorción se concretó durante las ruedas de prensa finales de la cumbre en el caso de Turquía. Chirac advirtió de que Ankara debe cumplir el compromiso adquirido con la Unión Europea y abrir sus puertos y aeropuertos a la vecina Chipre, si no quiere paralizar ella misma el proceso iniciado para su adhesión al club comunitario. "Si no lo hace, cuestionará su capacidad para seguir adelante el proceso", resaltó.
El presidente francés respondía así a las declaraciones del primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, que dijo hoy que su país no abrirá "jamás" sus puertos y aeropuertos a Chipre a menos que se ponga fin al aislamiento de la parte turca del norte de la isla. "Nunca daremos un paso adelante, ni en los puertos ni en los aeropuertos, sin que se levante el aislamiento", declaró Erdogan en un discurso en la Cámara de Comercio de Estambul.
No obstante, Turquía firmó en julio de 2005 el Protocolo de Ankara en virtud del cual se extiende el acuerdo aduanero a los diez nuevos países de la Unión Europea, incluido Chipre.
Pese a ello, en el momento de la firma, el Gobierno turco incluyó una declaración anexa en la que dice explícitamente que no reconoce oficialmente a la república greco-chipriota. Chipre y Turquía rompieron relaciones diplomáticas en 1974, cuando las tropas turcas invadieron el norte de la isla para evitar la anexión griega, lo que provocó la consiguiente división de la isla mediterránea.
Por su parte, el canciller austriaco y presidente de turno de la UE, Wolfgan Schuessel, insistió en que Turquía tiene la "clara obligación" de aplicar el protocolo de Ankara antes de finales de año y se mostró esperanzado en que cumpla. Schuessel no quiso, no obstante, comentar las declaraciones de Erdogan aunque apuntó que, si se confirman, serían "un problema".
Los Veinticinco, que el lunes abrieron el primer capítulo de los 35 que debe negociar Ankara para entrar en la UE, pidieron al país candidato intensificar el proceso de reformas y avanzar hacia el pleno cumplimiento de los criterios políticos de Copenhague, incluido el compromiso de mantener "buenas relaciones de vecindad".
"A este respecto, debería evitarse todo acto que pueda afectar negativamente en la resolución pacífica de conflictos", agrega el proyecto de conclusiones. El Consejo recuerda también al país candidato que debe cumplir las obligaciones del Protocolo de Ankara.
