Los demócratas anuncian un voto de confianza en el Senado contra Alberto Gonzales

Actualizado: viernes, 18 mayo 2007 0:01


WASHINGTON, 17 May. (EUROPA PRESS) -

Los demócratas anunciaron hoy que convocarán una moción de confianza en el Senado contra el secretario de Justicia Alberto Gonzales, al que acusan de socavar la independencia del Departamento de Justicia para cumplir los objetivos políticos del presidente George W. Bush.

Los senadores demócratas Chuck Schumer y Dianne Feinstein, que encabezaron la investigación sobre el papel de Gonzales en la destitución de varios fiscales federales, consideraron que el secretario de Justicia ha quedado demasiado debilitado como para liderar su departamento. Se desconocía cuándo tendrán lugar la votación.

Horas antes del anuncio de los legisladores de la oposición demócrata, el principal miembro republicano del Comité de Asuntos Judiciales del Senado, Arlen Specter, había vaticinado que la investigación sobre el despido de los fiscales llevará a la renuncia de Gonzales.

"Tengo la impresión de que cuando terminemos nuestra investigación, llegaremos al fin de las funciones del secretario de Justicia", declaró Specter, durante una audiencia del comité. "Pienso que cuando termine nuestra investigación, quedará claro, incluso para el secretario de Justicia y para el presidente, que este departamento que es tan vital para la seguridad nacional no está funcionando", consideró.

Sus declaraciones retomaron las críticas de esta semana a Gonzales, que asumió su puesto en 2005, convirtiéndose en el funcionario hispano de más alto rango en el Gobierno estadounidense. El ex subsecretario de Justicia James Comey declaró que Gonzales intentó que su antecesor, John Ashcroft, aprobara el programa de interceptación de comunicaciones telefónicas mientras estaba en una sala de cuidados intensivos.

Los demócratas denuncian que los fiscales federales fueron despedidos por razones políticas, es decir por negarse a procesar a funcionarios demócratas o por procesar con ahínco a republicanos cuestionados. El Gobierno rechaza las acusaciones.

Preguntado hoy en dos ocasiones durante una rueda de prensa sobre si él había ordenado personalmente a Gonzales y al por entonces jefe de gabinete de la Casa Blanca Andrew Card que fueran a ver a Ashcroft al hospital, Bush se negó a responder. "Hay muchos rumores sobre lo que sucedió y lo que no sucedió. No voy a hablar sobre eso", dijo el presidente.

Los hechos hicieron que el senador republicano Chuck Hagel se convirtiera en el cuarto legislador republicano en pedir la renuncia de Gonzales. Su colega Pat Roberts, por su parte, se unió a las críticas. "Cuando uno tiene que pasar más tiempo aquí en el Congreso que en el departamento de Justicia, tal vez deba pensarlo", declaró Roberts a AP.

El presidente del Comité de Asuntos Judiciales del Senado, que no ha pedido la renuncia de Gonzales, estuvo de acuerdo. "No tengo ninguna confianza en el secretario de Justicia ni en su liderazgo", manifestó Leahy, de la oposición demócrata.

Bush ha respaldado a Gonzales, un viejo amigo y consejero, para que permanezca en su puesto. Pero cuando el presidente vaticinó que Gonzales había sobrevivido al escándalo de los despidos de los fiscales, la declaración de Comey ayudó a ampliar la investigación de los demócratas.

Gonzales ha dicho que sólo ocho fiscales fueron despedidos. Pero el departamento de Justicia efectuó a lo largo de dos años una lista de 26 fiscales cuyo desempeño estaba en duda, dijo el jueves un funcionario familiarizado con el proceso. El departamento dijo que apoya plenamente a sus fiscales. La lista de los 26 nombres fue dada a conocer hoy por el diario 'The Washington Post'.