Dos heridos al incendiarse un edificio de inmigrantes en Jerusalén

Actualizado: lunes, 4 junio 2012 12:00

JERUSALÉN, 4 Jun. (Reuters/EP) -

Dos personas han resultado levemente heridas después de que un grupo no identificado incendiara en la noche del lunes un edificio de apartamentos de inmigrantes eritreos situado en un barrio judío de Jerusalén, en cuya entrada ha aparecido escrita en 'spray' la frase 'Marchaos del barrio'. Se trata de un nuevo acto de agresión racista contra los inmigrantes de origen africano tras los incidentes del pasado mes de mayo en Tel Aviv.

"Dos personas han resultado heridas levemente a causa de la inhalación de humo y han sido trasladadas al hospital para su tratamiento", declaró el portavoz de la Policía, Micky Rosenfeld, quien ha calificado el incidente de "acto deliberado". "Se ha enviado un equipo especial de investigación y la Policía está buscando a los sospechosos", añadió.

Alrededor de 60.000 africanos han atravesado ilegalmente en los últimos años la relativamente porosa frontera que mantienen Egipto e Israel en el desierto de Sinaí, huyendo de la pobreza, de las guerras y de los gobiernos autoritarios.

Israel asegura que la mayoría de estos africanos se desplazan por motivos económicos, pero las agencias humanitarias de la ONU y las organizaciones de Derechos Humanos han rechazado estos argumentos y han conseguido que ya no resulte tan fácil para las autoridades la deportación legal de estos inmigrantes.

La situación ha generado un fuerte debate en este país de 7,8 millones de habitantes ya de por sí fuertemente variado étnicamente. Algunos israelíes temen que la llegada de inmigrantes acarreará problemas demográficos y económicos, pero otros han advertido de que el recuerdo del Holocausto sufrido por los judíos durante la Segunda Guerra Mundial debería otorgar a Israel una responsabilidad especial a la hora de acoger a los extranjeros que buscan refugio.

En los últimos meses se ha disparado la violencia contra los inmigrantes, cuya máxima expresión fueron los disturbios registrados hace diez días en un barrio de bajos ingresos de Tel Aviv en el que viven numerosos inmigrantes eritreos, sudaneses y sursudaneses, a quienes los vecinos acusaban de ser los causantes de la delincuencia. La semana pasada, once menores de edad fueron inculpados de una serie de ataques racistas contra africanos en Tel Aviv.

Ayer domingo entró en vigor una nueva ley que permite a las autoridades israelíes encarcelar durante tres años a los inmigrantes en situación ilegal, una decisión fuertemente criticada por sectores progresistas y de Derechos Humanos.