EEUU/Canadá.- Un grupo de desertores de EEUU agradecen a Canadá su apoyo, en un encuentro al que asistió Cindy Sheehan

Europa Press Internacional
Actualizado: lunes, 19 junio 2006 3:50

FORT ERIE (ONTARIO, CANADÁ), 19 (EP/AP)

Un grupo de desertores del Ejército estadounidense agradecieron públicamente a Canadá su nueva vida, durante una reunión a la que asistió la activista antibélica Cindy Sheehan, quien les dijo que ella hubiera deseado que su hijo, que murió en la invasión a Irak, estuviera entre ellos.

"Yo le pedí que no fuera a Irak", recordó entre lágrimas la activista durante la reunión del sábado. Los ex soldados portaban camisetas negras con las letras "AWOL", siglas en inglés que significan que están ausentes de sus deberes militares sin autorización oficial.

"Yo hubiese querido que él estuviera de pie aquí con estas personas, porque él no quería ir" a la guerra, dijo Sheehan. La activista hizo su segunda visita a Canadá en apoyo del que se ha convertido en un refugio de quienes han desertado del Ejército estadounidense. El Gobierno canadiense les ha negado calidad de asilo político hasta ahora, pero los soldados han presentado apelaciones que están pendientes.

"Ellos tratan de deportarme", explicó Darrell Anderson, de Lexington, Kentucky, quién llegó a Canadá a través de Niagara Falls en enero de 2005. Anderson dijo que pasó siete meses en Irak y que recibió un Corazón Purpura tras un ataque con bomba, antes de decidir durante un permiso que no regresaría al país en guerra.

"Cuando estábamos en Irak, matábamos a personas inocentes por el petróleo. Era obvio que ellos no querían que nosotros estuviéramos allí", dijo Anderson, de 24 años, quién está solicitando un permiso para residir legalmente en Canadá.

Grupos pacifistas de Canadá y Estados Unidos organizaron la reunión en un parque en Fort Erie, que hace frontera con Búfalo, Nueva York. Aproximadamente 20 ex soldados estadounidenses han solicitado al Gobierno de Canadá que los reconozca como refugiados. Los organizadores estiman que puede haber hasta 200 soldados estadounidenses en el país que no han pedido esa protección formal todavía.

"Dicen que somos traidores, que somos desertores", indicó el ex infante de Marina Chris Magaoay, de 20 años, de la isla hawaiana de Maui. "Pero no, yo soy un infante de Marina y defiendo lo que creo, y yo creo que la Constitución de Estados Unidos de América está siendo menospreciada como un pedazo de papel".

Los soldados le agradecieron a los canadienses su hospitalidad. Entre los asistente al encuentro también había desertores de la guerra de Vietnam que buscaron refugio en Canadá hace décadas.

Sheehan, que ganó fama hace un año con su protesta de un mes ante el rancho del presidente George W. Bush en Texas, elogió a los desertores militares. "Son seres humanos con sentido moral que no quieren ir a Irak y matar a personas inocentes para engordar los bolsillos de George Bush y la maquinaria de guerra", dijo.

Contenido patrocinado