NUEVA YORK, 28 Nov. (del corresponsal de EUROPA PRESS Carlos López) -
La Casa Blanca reconoció ayer, lunes, que Irak se encuentra claramente "en una nueva fase" y expresó la necesidad de adoptar de forma urgente nuevas medidas para controlar la violencia, coincidiendo en que los acontecimientos "no evolucionan al ritmo esperado" en Irak y que Estados Unidos debe encontrar vías para "adaptarse".
Según publica la cadena norteamericana 'ABC', la Casa Blanca también anunció que el presidente estadounidense, George W. Bush, en la reunión que mantendrá al final de esta semana con el primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, en Ammán (Jordania) discutirán sobre las conversaciones directas que puedan llevar a cabo Irán e Irak sin la participación de Estados Unidos.
En Estados Unidos, señala 'ABC', el grupo de diez expertos que integran el Grupo de Estudio para Irak, encabezado por el ex secretario de Estado James Baker y por el ex representante demócrata por Indiana Lee Hamilton centrarán sus recomendaciones en que EEUU inicie conversaciones con Siria e Irán para detener la violencia en Irak.
Funcionarios de la Administración Bush aseguraron a 'ABC' que la Casa Blanca no aceptaría esta recomendación pero vería con buenos ojos duplicar o triplicar el número de efectivos integrados en las fueras de seguridad iraquíes y dar al Gobierno iraquí un mensaje claro de que el Ejército estadounidense no dará un apoyo indefinido.
En cuanto a un marco para la retirada de las tropas, es poco probable que el grupo presente un estrategia radical, ya que el presidente Bush se ha mostrado siempre opuesto a fijar una fecha para la retirada y el propio consejo se encuentra dividido en este asunto sobre una fecha para la retirada o el incremento de tropas a corto plazo.
