WASHINGTON 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos ha condenado "en los términos más enérgicos" el ataque talibán perpetrado en la madrugada del viernes contra su consulado en la ciudad afgana de Herat (oeste) y ha asegurado que el sistema de seguridad funcionó correctamente.
"Estados Unidos condena en los términos más enérgicos el ataque contra nuestro consulado en Herat. Lamentamos profundamente la pérdida de vidas y los heridos entre la población y el personal de seguridad afganos. Nuestras oraciones están con las víctimas y sus familias", ha dicho la portavoz del Departamento de Estados, Marie Harf.
Harf ha aclarado que "las medidas de seguridad fueron efectivas". "Los atacantes consiguieron dañar la puerta principal, pero no consiguieron llegar dentro. Fueron neutralizados sin pérdida de vidas estadounidenses", ha destacado.
Interrogada sobre si había alguna amenaza específica contra la oficina consular, lo ha negado, al tiempo que ha recordado que "las instalaciones estadounidenses en Afganistán siempre operan al máximo nivel de alerta porque es una zona de guerra y sabemos que los terroristas tienen capacidad para llevar este tipo de ataques".
Harf ha explicado que el consulado estadounidense en Herat ha sido cerrado y que todo su personal ha sido trasladado a Kabul "temporalmente" hasta que los daños sean reparados. "No sé cuándo se reabrirá", ha adelantado.
Además ha agradecido "la rápida respuesta de las fuerzas afganas y de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), así como "el apoyo y su continua alianza" a la Gobernación de Herat y al Gobierno de Hamid Karzai.
EL ATAQUE
El ataque se produjo alrededor de las 6.00 horas del viernes (4.00 horas en España) cuando los talibán hicieron explotar un camión cargado con explosivos frente a la entrada principal de la oficina consular y acto seguido estrellaron otro camión para abrirse paso.
Entonces, varios talibán intentaron acceder al consulado estadounidense, pero se encontraron con la oposición de los guardias de seguridad, que rápidamente recibieron el apoyo de las fuerzas afganas y de la ISAF.
Los combates se saldaron con al menos siete muertos --cuatro talibán, dos guardias de seguridad y un traductor-- y 17 heridos, todos civiles, entre los que habría tres niños, de acuerdo con Tolo News. La Embajada en Kabul ha aclarado que "no hay víctimas estadounidenses".
Los talibán han reivindicado la autoría del ataque. "Nuestro objetivo era demostrar a los estadounidenses que no están seguros en ningún lugar de este país", ha dicho el portavoz insurgente Qari Yusuf Ahmadi, en un correo electrónico enviado a la prensa internacional.
Se trata de la segunda vez que los talibán atacan el consulado de Estados Unidos en Herat desde su apertura, en 2010.