MADRID 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
La manifestación celebrada este viernes frente al palacio presidencial egipcia se ha saldado con enfrentamientos de poca consideración después de que las Fuerzas Armadas retiraran un muro de cemento levantado en una calle cercana tras la publicación el 22 de noviembre de la declaración constitucional por parte del presidente, Mohamed Mursi.
Los manifestantes se han opuesto a la apertura de la calle argumentando que les protegía de posibles ataques por parte de bandas armadas opositoras, según ha informado el diario egipcio 'Al Masry al Youm'.
Por ello, han intentado sustituir el muro con alambre de espino a barras de hierro, lo que ha provocado la respuesta de las fuerzas de seguridad, que han procedido a detener a varios de los presentes. En respuesta, los manifestantes se han enfrentado a los agentes.
Los detenidos han sido liberados tras negociaciones entre la Policía y los manifestantes, tras las que los agentes se han comprometido a no disolver la sentada, que ha entrado este viernes en su undécimo día consecutivo.
Tras ello, los presentes han cerrado la calle y la salida de metro con alambre de espino, amenazando con bloquear todas las calles que rodean el palacio presidencial si se producen nuevos arrestos.