ANKARA, 18 Oct. (Reuters/EP) -
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado este martes que las milicias kurdas de las Unidades de Protección Popular (YPG) serán expulsadas de la ciudad siria de Manbij una vez que el Estado Islámico sea desplazado de la cercana localidad de Al Bab.
Además, Erdogan ha revelado que ya hay contactos con Estados Unidos para lanzar una operación contra la "capital" del Estado Islámico en Siria, Raqqa, en el noreste del país.
Por último, ha explicado que la intención de Turquía de imponer una "zona de seguridad" de unos 5.000 kilómetros cuadrados en el norte de Siria como garantía para la segurdad de la frontera turca.
Erdogan ha defendido además la implicación de Turquía en la ofensiva para expulsar al Estado Islámico de Mosul por su "responsabilidad histórica" en la región. Turquía ha participado en la formación de unos 3.000 militares del Ejército y de los Peshmerga, el Ejército del Kurdistán iraquí.
En particular, ha mencionado los risegos para la población árabe suní y turkmena y ha cuestionado la presencia estadounidense. "Venís desde decenas de miles de kilómetros para decir que Bagdad os ha llamado. De acuerdo, pero Turquía tiene una frontera de 350 kilómetros y siempre hay una amenaza", ha argumentado. "Turquía tiene una responsabilidad histórica, así que estaremos allí", ha apostillado.
Erdogan se ha referido a la presencia de milicias chiíes y ha recordado las denuncias sobre graves violaciones de los Derechos Humanos perpetradas por las mismas en localidades suníes iraquíes de otros puntos del país. Por ello, ha presentado a Turquía como un garante de que no haya conflictos sectarios.
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