MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional, en coordinación con la Policía búlgara, han conseguido liberar, en menos de 24 horas, a un ciudadano español que había sido secuestrado en la ciudad de Varna (Bulgaria), informó hoy el Ministerio del Interior. Dos individuos de nacionalidad búlgara y de 19 años de edad fueron detenidos como autores materiales del secuestro.
La víctima fue asaltada por unos desconocidos el pasado lunes, quienes le maniataron y le trasladaron a una fábrica, en donde permaneció custodiado por sus captores. Durante el cautiverio sufrió diversas agresiones físicas.
El español secuestrado colaboraba en Bulgaria, en calidad de testigo protegido, en una investigación llevada a cabo por la Brigada de Investigación del Banco de España de la Comisaría General de Policía Judicial.
Las investigaciones se iniciaron a raíz de una llamada efectuada a las ocho horas del pasado lunes por el propio secuestrado al móvil de su hermano, en la que le informaba de los pormenores de su cautiverio en la ciudad de Varna, en la costa de Bulgaria. Los secuestradores exigían 2.300 euros antes de las 12,30 horas, o de lo contrario acabarían con su vida. Uno de los que le custodiaban respondía al nombre de Nikolay.
INSTRUCCIONES A SU HERMANO
La víctima, antes de viajar a Bulgaria, había dado instrucciones a su hermano para que, en el supuesto caso de que le ocurriese algo, se pusiera de inmediato en contacto con los policías españoles de la Brigada de Investigación del Banco de España.
A través de la puesta en funcionamiento de un dispositivo conjunto en el que participaron el Grupo de Secuestros y Extorsiones de la Udev Central y la Brigada del Banco de España, se intensificaron las gestiones para determinar el lugar exacto en el que se encontraba el secuestrado.
Una vez localizado el lugar, se inició el proceso de negociación policial con los individuos que tenían retenido al español. Estos presionaron y amenazaron con ejecutar al rehén si no se pagaba la cantidad solicitada en un breve periodo de tiempo.
Con el apoyo de policías búlgaros y de los servicios de seguridad de la Wester Union, empresa a través de la cual se exigía el dinero, fue detenido Nikolay y liberado el ciudadano español. Mediante numerosos contactos telefónicos los Grupos especiales de la Policía búlgara localizaron a ambos delincuentes en el interior de una oficina de la Wester Union. El compinche de Nikolay, Rangel, se dió a la fuga en un coche BMW. Tras una peligrosa persecución fue detenido.
Las autoridades búlgaras están practicando diversas entradas y registros, y buscan a otro individuo de nombre Dian, ex-boxeador, que al parecer intervino en el secuestro. El grupo criminal desarticulado podría estar involucrado, además, en delitos de tráfico de armas y falsificación de moneda.
