MANILA/PEKÍN, 3 Sep. (Reuters/EP) -
Filipinas ha acusado este martes a China de violar un código de conducta informal sobre el Mar de China Meridional al planear la construcción de nuevas estructuras en un banco de arena en disputa.
Las relaciones entre los dos países han empeorado en torno a las disputas territoriales por el Mar de China Meridional. China, potencia cada vez más poderosa, reclama la mayor parte de las aguas, al igual que Filipinas.
China y Filipinas se acusan mutuamente de violar la Declaración de Conducta (DoC, por sus siglas en inglés), un acuerdo no vinculante basado en la confianza sobre conducta marítima, firmado por China y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN por sus siglas en inglés), de la que Filipinas es país miembro, en 2002.
El secretario de Defensa filipino, Voltaire Gazmin, ha afirmado que China ha violado la DoC al prepararse para construir nuevas estructuras en el banco de arena de Scarborough, una localización en disputa.
"Hemos divisado bloques de hormigón en el interior del bloque de arena, que son el preludio de una construcción", ha declarado Gazmin, al tiempo que mostraba fotos aéreas de vigilancia de la zona.
Según el secretario de Defensa, las fotos, que fueron tomadas el sábado, son un patrón preocupante de construcción similar a la edificación de un cuartel en el arrecife de Mischief a finales de los años 90.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Hong Lei, ha reconocido que no posee "ninguna información" sobre las acusaciones vertidas este martes por Gazmin.
El primer ministro chino, Li Keqiang, que se encuentra en la China-ASEAN Expo, una feria anual en la que el país se reúne con los países miembros de la ASEAN, ha asegurado que China quiere realmente una resolución pacífica a las disputas territoriales sobre el Mar de China Meridional, aunque ha señalado que no tienen ninguna prisa en firmar un acuerdo consensuado que reemplace la DoC.
Asimismo, ha recordado que China siempre ha apostado por mantener unas conversaciones sobre el Mar de China Meridional basadas en "un respeto histórico de la realidad y de la ley internacional".
"El Gobierno chino está dispuesto y preparado para asumir una política que permita encontrar una resolución apropiada a través de consultas amistosas", ha añadido el primer ministro chino.
Según Li, China "procederá de manera sistemática e impulsará las conversaciones por un Código de Conducta sobre el Mar de China Meridional". Del mismo modo, ha insistido en que las conversaciones sobre esta disputa territorial han de producirse entre las partes directamente implicadas, renegando así de cualquier intervención extranjera.
Pekín ha anunciado también que acogerá este mes las conversaciones entre altos cargos de ambos países sobre esta disputa territorial. Los críticos consideran que China está intentando cimentar sus demandas sobre el Mar de China Meridional a través su superioridad naval y que no tiene prisa por acordar un Código de Conducta.
(EUROPA PRESS INTERNACIONAL)