SARAJEVO, 13 Dic. (Reuters/EP) -
La Fiscalía bosnia que examina los crímenes de guerra ha imputado al líder paramilitar serbobosnio Milan Lukic por el secuestro y asesinato de 20 personas, un nuevo frente para un criminal que ya fue condenado en 2009 a cadena perpetua por el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY).
Entre los abusos más graves atribuidos a Lukic, internado en una cárcel de Estonia, figura el asedio y la quema de un inmueble en el que había refugiados más de 70 musulmanes, entre ellos niños, en la localidad de Visegrado. El propio Lukic disparó contra quienes intentaban escapar.
La Fiscalía ha anunciado ahora la imputación del líder de los Águilas Blancos o Vengadores por el rapto, tortura y ejecución de 20 personas --en su mayoría musulmanes-- interceptadas en un tren que había partido desde Serbia y se dirigía a Montenegro.
Según la Fiscalía, el grupo de Lukic paró el tren y llevó a las víctimas a una escuela del este de Bosnia donde se produjeron las torturas. Por orden de Lukic, estas personas fueron trasladadas a orillas del río Drina para su asesinato, el 27 de febrero de 1993. Solo se localizaron cuatro cadáveres.
Ahora, "el tribunal decidirá" si formaliza estos cargos, según un portavoz del Ministerio Público que no ha aclarado cuál sería el próximo paso habida cuenta de que Lukic ya cumple condena. Los criminales condenados a cadena perpetua por el TPIY solo pueden solicitar su libertad pasados 30 años.
