FMI.- La polémica sobre la novia de Wolfowitz revela el descontento en el BM con el ex subsecretario de Defensa

Actualizado: domingo, 15 abril 2007 19:22

WASHINGTON, 15 Abr. (del corresponsal de EUROPA PRESS Carlos López) -

El escándalo originado tras revelarse la participación directa del presidente del Banco Mundial y ex subsecretario de Defensa del Gobierno estadounidense, Paul Wolfowitz, en la promoción y subida de sueldo de su pareja, Shaha Riza, ha puesto de relieve el descontento del personal de la institución que preside.

Las decisiones adoptadas durante sus dos años en el cargo por el ex 'número dos' del Pentágono, bajo la secretaría de Donald Rumsfeld, y uno de los orquestadores de la guerra de Irak, han creado malestar entre los trabajadores del Banco Mundial, que contemplan con rechazo el trato concedido a Wolfowitz y su personal directo.

Según publica hoy el periódico estadounidense 'The Washington Post', desde incluso antes de ser nombrado oficialmente presidente del Banco Mundial, las exigencias de Wolfowitz distanciaron al funcionario americano del tradicional funcionamiento del organismo, con negociaciones sobre su salario y privilegios, no conocidos hasta el momento en la institución.

"Wolfowitz quiso más de una docena de cláusulas adicionales al contrato estándar que ha utilizado la institución durante décadas", señala el rotativo, citando al equipo legal del Banco que tuvo que negociar con los términos de su contrato con su abogado personal, Robert Barnett, un conocido --y experimentado en estas labores-- letrado de Washington.

Entre los requisitos que expuso el abogado de Wolfowitz se incluían dispensas especiales para la elaboración de los libros que pensaba escribir y para los discursos remunerados que planeaba pronunciar, así como un salario al mismo nivel que el del director gerente del FMI, Rodrigo Rato, que tradicionalmente es más elevado.

En un correo electrónico enviado al entonces consejero general Roberto Dañino, Wolfowitz exigió mantener "contacto profesional" con Riza, algo que posteriormente la ejecutiva del banco determinó que suponía un claro conflicto de intereses con las normas de personal y que ahora regresa a la actualidad al revelarse la participación directa del ex 'número dos' del Pentágono en la promoción temporal de su novia en el Departamento de Estado y su aumento salarial en el Banco.

Según 'The Washington Post', que cita fuentes del Banco Mundial que desean mantener el anonimato por miedo a represalias o rechazo a verse involucradas en la controversia, las exigencias iniciales de Wolfowitz definieron su relación con el personal de la institución y los gobernadores en un amplio abanico de aspectos durante su presidencia.

Entre los desencuentros que le han distanciado de su personal, el rotativo señala la deferencia en la concesión de beneficios salariales y autoridad concedida a sus ayudantes Robin Cleveland y Kevin Kellems, ambos trasladados desde la Casa Blanca al Banco Mundial a posiciones ejecutivas y con salarios de un cuarto de millón de dólares anuales libres de impuestos a pesar de carecer de experiencia en materia de desarrollo, misión fundamental del Banco Mundial.