MADRID, 27 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Francia ha reiterado este lunes su oposición a la pena capital tras la condena a muerte contra tres franceses en Irak por unirse al grupo yihadista Estado Islámico, si bien ha afirmado que "respeta la soberanía" de las autoridades iraquíes.
"Los terroristas de Estado Islámico deben responder por sus crímenes ante el sistema de justicia", ha dicho el Ministerio de Exteriores francés, antes de resaltar que "los adultos detenidos en Irak deben ser juzgados por tribunales iraquíes si tienen jurisdicción para hacerlo".
Pese a ello, ha subrayado que "Francia se opone, por principios, a la pena de muerte en cualquier momento y lugar", ha señalado en su comunicado, en el que ha agregado que "la Embajada francesa en Irak, al dar protección consular, está dando los pasos necesarios para recordar a las autoridades iraquíes esta posición".
Asimismo, ha asegurado que los condenados "han recibido protección consular durante su detención". Los tres hombres tienen derecho a apelar su sentencia durante un plazo de 30 días.
Los sospechosos comparecieron ante un juez de un tribunal antiterrorista de Bagdad durante la jornada del 6 de marzo, en un paso procedimental previo al inicio de los juicios contra ellos.
Todos ellos firmaron confesiones afirmando que estuvieron en Mosul cuando era parte del 'califato' de Estado Islámico entre 2014 y 2017, según fuentes citadas por Reuters, que hablaron bajo condición de anonimato.
Sin embargo, en abril fue liberado un francés detenido en Siria y acusado de unirse a Estado Islámico después de que un tribunal afirmara que no había pruebas suficientes contra él.
DECISIÓN "SOBERANA"
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, declinó a finales de febrero pronunciarse sobre las informaciones sobre la entrega de trece yihadistas franceses por parte de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) a las autoridades de Irak, en el marco de una rueda de prensa conjunta con su homólogo iraquí, Barham Salí.
En este sentido, dijo que la posibilidad de que sean juzgados en el país asiático --extremo confirmado por Salí-- es una decisión "soberana" de Bagdad, antes de agregar que los sospechosos recibirían "acceso consular".
Salí destacó que los yihadistas entregados a Bagdad están "acusados de llevar a cabo operaciones contra iraquíes e instalaciones iraquíes en Irak", por lo que "serán juzgados según la ley iraquí". "Actuamos en el marco del Derecho Internacional en este asunto", zanjó.
