Francia.- Sarkozy sigue perdiendo popularidad y arrastra en su caída al primer ministro francés

Actualizado: viernes, 2 mayo 2008 16:00

PARIS, 2 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, parece no haber recuperado la confianza de sus conciudadanos con la emisión televisada del pasado 24 de abril y pierde dos puntos de popularidad en el último sondeo, elaborado por CSA y publicado hoy por 'Le Parisien'.

El sondeo revela, además, que el jefe del Estado arrastra en su caída al primer ministro, François Fillon, quien ve su hasta ahora buena puntuación descender ocho enteros. Este resultado acerca el índice de confianza que los franceses depositan en ambos y reduce la diferencia que les separaba hasta ahora.

Tan sólo el 38% de los franceses dicen tener confianza en el jefe del Estado y el 57% de los encuestados, es decir tres puntos más que hace un mes, asegura no tener confianza en Sarkozy. En el caso de Fillon, el porcentaje de opiniones favorables retrocede del 50% al 42% en un mes y el de quienes desconfían del primer ministro llega en mayo al 51%, siete puntos más que hace 30 días.

Se trata de la primera vez desde junio de 2007 que Fillon cosecha una mayoría de descontentos, y tanto el Elíseo como Matignon, sede de la oficina del primer ministro, empiezan a preocuparse seriamente, sobre todo porque los expertos en opinión pública descartan una recuperación espectacular a corto plazo.

El único dato que puede tranquilizar a Sarkozy es que sus propias filas se han vuelto a movilizar y el 87% de los electores que se dicen próximos a la UMP siguen apoyándole tanto a él como al primer ministro, que recoge un 86% de opiniones favorables.

Por el contrario, la izquierda rechaza sin paliativos a Sarkozy y sólo el 13% de sus simpatizantes se dicen satisfechos con el jefe del Estado, que tampoco contenta a los asalariados (29%) ni a los profesionales liberales (25%).

Así pues, la famosa 'ruptura' por la que apostó el 53 % de los franceses eligiendo a Sarkozy como presidente el pasado 6 de mayo de 2007 tiene a menudo un sabor "más amargo que azucarado", resalta 'Le Parisien' apoyándose en los eslóganes que pudieron verse en las pancartas de los manifestantes que salieron ayer a las calles parisinas con motivo del 1 de mayo.

'Esto no puede durar más, esto va a reventar', rezaban algunos carteles. 'Hay que eliminar sólo un puesto, el del Elíseo', decían otros, haciéndose eco de las protestas por la reforma de las pensiones o la eliminación de puestos de trabajo en la educación que, con el telón de fondo de la crisis financiera internacional, minan la moral de los franceses y hunden al presidente y su primer ministro en la tormenta.