Francia.- Los sindicatos mantendrán mañana su primer pulso con Villepin para frenar las reformas del mercado de trabajo

Actualizado: lunes, 6 febrero 2006 12:04

PARIS, 6 Feb. (Del corresponsal de EUROPA PRESS, Javier Gómez Muñoz) -

El primer ministro francés, Dominique de Villepin, afrontará, mañana, su primer pulso con los sindicatos desde que llegó al poder en junio del pasado año. Las organizaciones de trabajadores, de estudiantes y la oposición apoyarán las movilizaciones de mañana contra la flexibilización del mercado de trabajo que se discute en estos días en la Asamblea Nacional.

La mayoría de los franceses se muestra contraria a las iniciativas de Villepin en este campo, principalmente al Contrato Primer Empleo (CPE), concebido para los jóvenes. Se trata de un contrato flexible que permite el despido libre durante dos años (con una indemnización mínima) antes de que el trabajador sea contratado como fijo.

El 52 por ciento de los franceses rechaza esta reforma, mientras sólo el 40% la apoya, según un sondeo publicado hoy en "Libération". Los jóvenes (56 por ciento de opiniones contrarias) son quienes ven con peores ojos este cambio sustancial del mercado laboral de Villepin, que ya puso en marcha una iniciativa parecida con los contratos nuevo empleo (CNE), concebidos para las pequeñas y medianas empresas.

Villepin afirmó ayer que "el CPE es el proyecto más social jamás elaborado para los jóvenes" y que no se trata de un "subcontrato" a pesar de los dos años de prueba. "Es un contrato antiprecario", justificó el primer ministro, entrevistado en televisión.

François Chérèque, líder del segundo sindicato del país, la CFDT, respondió al primer ministro que "se precariza a todos los jóvenes, y también a lo que, por su cualificación, tienen acceso al mercado de trabajo". "Asistimos a un ataque en regla contra el contrato laboral", opinó el sindicalista.

Las tensiones con los sindicatos están provocando una erosión en la imagen pública del primer ministro, que ha triunfado en los sondeos desde su llegada al Palacio de Matignon, sede del Gobierno. La popularidad del jefe del Ejecutivo ha pasado, en un mes, del 49 al 44 por ciento, e igualan prácticamente a las opiniones negativas (43 por ciento).

Los sindicatos han previsto manifestaciones en todo el país. La más importante partirá a las 14.00 horas de la Plaza de la Bastilla. La movilización de mañana está apoyada por un 61 por ciento de los ciudadanos, según el citado sondeo.

La oposición socialista, comunista y verde considera que esta reforma conllevará una "precarización del trabajo" y anunció que presentará una "larga batalla" en la Asamblea para retrasar lo máximo posible, por vía de enmiendas, la aprobación del texto y desgastar al Ejecutivo. La centrista UDF también está en contra de la ley, pero no apoya las movilizaciones.

El Gobierno podría decidir aprobar la ley por decreto, para evitar el farragoso combate parlamentario, como no descartó, ayer, Dominique de Villepin. "Deseamos un debate en la Asamblea, pero si hay obstrucción, ya veremos".