El Gobierno kuwaití dimite para dar paso a un nuevo ejecutivo

MADRID 3 Dic. (EUROPA PRESS) -

El emir de Kuwait, el jeque Sabá al Ahmad al Sabá, ha aceptado la dimisión presentada por el Gobierno del país, un trámite necesario para el nombramiento del nuevo ejecutivo tras la celebración de las elecciones legislativas el pasado sábado, marcadas por el llamamiento a la abstención de la oposición.

"El Gabinete ha pasado este lunes una nueva página en la historia de la política kuwaití antes de la primera sesión del nuevo Parlamento, fijada para el 16 de diciembre, con la lectura de un discurso de dimisión en el Palacio Sief", sede del emir, ha informado la agencia de noticias oficial, KUNA.

La legislación kuwaití establece que el gobierno dimita y se forme el nuevo ejecutivo antes de la primera sesión del nuevo Parlamento salido de unas elecciones. Hasta el nombramiento del nuevo gobierno, el presente seguirá actuará en funciones.

Los comicios del pasado sábado son los segundos en lo que va de año en el país árabe, sumido en una crisis política debido a las protestas de la oposición. El nuevo parlamento previsiblemente será más afín al Gobierno, ya que no hubo candidatos de la oposición en la votación.

La oposición ha asegurado que, según sus datos, la participación fue del 26,7 por ciento, mientras que el Ministerio del Interior kuwaití la cifró en el 38,8 por ciento para posteriormente decir ayer que alcanzó el 40,3 por ciento. En los tres comicios anteriores la participación estuvo en torno al 60 por ciento.

NUEVA ASAMBLEA

En las elecciones de este sábado, boicoteadas por la oposición, un récord de 17 candidatos de la minoría chií consiguieron escaños, destaca el 'Kuwait Times'. En los anteriores comicios, que posteriormente fueron anulados, habían logrado siete mientras que en las elecciones de 2009 se hicieron con nueve.

Además, la Asamblea contará con tres mujeres, mientras que los islamistas suníes han visto reducida su presencia de los 23 escaños que tenían en el Parlamento derogado este año a solo cuatro.

Mientras, las tres grandes tribus beduinas, los Awazem, los Mutair y los Ajman, que representan una población de más de 430.000 personas, solo consiguieron un escaño frente a los alrededor de 17 que solían obtener en elecciones anteriores.