MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Derechos Humanos de Yemen, Huria Mashur, ha hecho este domingo un llamamiento al alto el fuego entre la comunidad huzi (perteneciente a la rama chií del Islam) y grupos salafistas (rama radical del Islam suní) tras los últimos enfrentamientos armados registrados en la provincia de Saada.
Mashur ha urgido a los líderes tribales de ambas partes que regresen a la mesa de negociaciones, en medio de las acusaciones mutuas sobre la responsabilidad del estallido de los enfrentamientos, según ha informado el diario 'The Yemen Post'.
En este sentido, ha expresado su "gran preocupación" por el número de presuntas violaciones de los Derechos Humanos que han tenido lugar en el marco de las tensiones en la localidad de Dammaj, donde se han centrado los combates.
"El pueblo de Yemen está cansado de la guerra y la violencia. La guerra sólo ha generado dolor y sufrimiento, y ha dejado atrás huérfanos y viudas. El odio sólo da beneficios a los 'señores de la guerra' y lleva a la pobreza y evita el desarrollo social y económico", ha remachado Mashur.
Las tensiones entre ambas comunidades se han incrementado drásticamente en los últimos años en medio de las acusaciones de que las dos pretenden imponer su visión del Islam en la zona, lo que ha degenerado en enfrentamientos de corte sectario en toda la provincia.
