KANO (NIGERIA), 18 Feb. (Reuters/EP) -
El grupo islamista nigeriano Ansaru, afín a la red terrorista Al Qaeda, ha reivindicado este lunes el secuestro ayer domingo de siete extranjeros que fueron capturados en el estado nigeriano de Bauchi, en el norte del país. Los secuestrados son siete trabajadores: cuatro libaneses, un británico, un italiano y un griegos.
"Por la gracia de Alá tenemos bajo custodia a siete personas incluidos libaneses y sus contrapartes europeos que trabajaban para Setraco", señala el comunicado de Ansaru. Justifican este secuestro por las "agresiones y atrocidades perpetradas por los países europeos contra la religión de Alá en muchos lugares, como Afganistán y Malí".
Individuos armados asaltaron en la noche del sábado un complejo residencial de la constructora libanesa Setraco en Jamaare. En el ataque murió un guardia de seguridad. El grupo Ansaru, o Jamaatu Ansarul Musilimina Fi Biladis Sudan, Vanguardias para la Protección de los Musulmanes en el África Negra, ya ha perpetrado más secuestros de extranjeros en Nigeria.
En el complejo en el que se perpetró el secuestro se pueden ver todavía los agujeros de bala y los casquillos en el suelo y los trabajadores extranjeros han abandonado el lugar. La Policía registraba la zona este lunes en busca de posibles pistas, han informado testigos presenciales.
Al parecer los milicianos islamistas atacaron primero una comisaría y una prisión para inmovilizar a las fuerzas de seguridad de la zona y después se dirigieron al complejo de Setraco, ha explicado el responsable del mismo, Musa Alhamdu. "Algunos atacaron desde el norte y otros desde el sur. Hicieron socavones en los accesos de seguridad utilizando explosivos", ha relatado.
Entre las acciones de Ansaru se cuentan un ataque contra una prisión de Abuya el pasado mes de noviembre en el que lograron liberar a cientos de internos. También atacaron un convoy del Ejército nigeriano que se dirigía a Malí para sumarse a la coalición africana que combate a las milicias islamistas del norte del país.
Además ha reivindicado el secuestro de un ciudadano francés desaparecido desde el año pasado, un caso que provocó que Francia prohibiera el velo integral y se decidiera a intervenir en Malí.
