MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
Al menos once personas resultaron heridas el domingo por disparos de las fuerzas de seguridad contra una manifestación celebrada en el estado de Darfur Norte contra la junta militar establecida en el país tras el golpe de Estado que derrocó a Omar Hasán al Bashir.
El gobernador en funciones del estado, Malik al Tayeb Jojali, ha detallado que entre los heridos figura un policía y ha agregado que durante los incidentes fueron incendiadas unas oficinas de los servicios de Inteligencia en Kutum, según la agencia estatal sudanesa de noticias, SUNA.
El Comité Central de Doctores de Sudán denunció el domingo que agentes de los servicios de Inteligencia habían empleado fuego real contra los manifestantes, que protestaron en apoyo a la sentada en Jartum frente a la sede del Ministerio de Defensa.
Así, señaló que diez personas habían resultado heridas de bala y que dos se encontraban en estado crítico. Testigos han agregado que el número de heridos ascendió a doce poco después de la publicación del comunicado.
Según las informaciones recogidas por la emisora local Radio Dabanga, los manifestantes en Kutum entregaron un documento pidiendo el fin de las actividades de los servicios de Inteligencia y el cierre de las oficinas.
Un activista local citado por esta emisora ha indicado que los manifestantes se dirigieron a la sede de los servicios de Inteligencia, tras lo que los agentes abrieron fuego. Posteriormente, varios de ellos irrumpieron en las oficinas después de que los agentes se replegaran de la zona.
Las Fuerzas de la Declaración de la Libertad y el Cambio, organización que aglutina a los grupos impulsores de las protestas que acabaron con la dictadura de Al Bashir, anunciaron el domingo que rompían las relaciones con la junta militar y exigieron una transición civil inmediata.
"Nuestras relaciones con el comité político han sido positivas, pero nos tratan de la misma manera, lo que ha provocado que hayamos suspendido nuestras relaciones", explicó un portavoz de la coalición opositora.
Horas antes de dicha declaración, el líder del Consejo Militar de Transición, Abdelfatá al Burhan, había anunciado que la junta está debatiendo la formación de un consejo conjunto integrado por militares y civiles, una de las demandas clave de los opositores.
El propio Al Burhan confirmó el domingo que Al Bashir y varios altos cargos cercanos al exmandatario han sido encarcelados, varios días después de que fuentes de la familia del expresidente afirmaran que había sido trasladado a la prisión de Kobar, en Jartum.
El expresidente está reclamado por el Tribunal Penal Internacional (TPI), que mantiene vigente una orden de detención por genocidio y crímenes contra la Humanidad por la campaña contra la insurgencia ordenada por el mandatario en la región de Darfur.
