BEIRUT, 10 Ago. (Reuters/EP) -
El partido-milicia chií libanés Hezbolá ha asegurado este jueves que el retraso en la formación de un nuevo gobierno hace que Líbano esté en riesgo de deslizarse "hacia la tensión".
La demora "ha empezado a correr el riesgo de deslizarse hacia la tensión (...) y advertimos sobre los peligros de esto", ha señalado en unas declaraciones televisadas tras la reunión semanal de su bloque parlamentario.
Líbano se enfrenta a un punto muerto político tres meses después de unas elecciones que inclinaron la balanza en el Parlamento hacia Hezbolá. Poco después de las elecciones, celebradas el 6 de mayo, el político suní Saad al Hariri fue designado para continuar como primer ministro y comenzó las negociaciones con los partidos rivales del país para formar un Gobierno de unidad.
Sin embargo, aún no hay señales de los compromisos necesarios para acordar un nuevo gabinete, con cristianos, drusos, chiíes y suníes que luchan por los ministerios.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha afirmado que Líbano necesita "un ajuste fiscal inmediato y sustancial" para hacer sostenible su deuda pública, una de las más altas del mundo en alrededor del 150 por ciento del Producto Interior Bruto.
Posteriormente, Hariri se reunirá con el ministro de Asuntos Exteriores, Gebran Bassil, jefe del Partido Movimiento Patriótico Libre (FPM, según sus siglas en inglés) del presidente Michel Aoun, según su oficina.
Hariri se ha reunido este jueves con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, y ha señalado que espera que se forme un nuevo gobierno en los próximos días.
