BALI (INDONESIA), 14 (EP/AP)
Un miliciano islámico fue condenado hoy a quince años de cárcel por los atentados en Bali en 2005 que dejaron 20 muertos, pese a lo cual no mostró ningún remordimiento y prometió participar en nuevos atentados suicidas una vez liberado.
Anif Solchanudin, uno de los cuatro hombres condenados por los ataques contra tres restaurantes, fue acusado de ayudar a planear los atentados y de esconder a uno de los presuntos terroristas más buscados del sureste asiático.
El juez Daniel Palipin dijo que el Tribunal de Distrito de Denpasar había decidido condenar a quince años al acusado, cinco más de los reclamados por los fiscales, porque el miliciano, de 24 años, se había ofrecido para convertirse en kamikaze en los atentados del 1 de octubre de 2005.
Solchanudin señaló a la prensa tras conocerse el veredicto que pretende convertirse en mártir una vez sea puesto en liberar y que no planea apelar su sentencia. Los otros tres hombres juzgados por estos atentados recibieron penas de entre 8 y 18 años de cárcel, todos ellos por ayudar al presunto cerebro Noordin Top, transportar los explosivos o crear una web para dar consejos sobre cómo matar a extranjeros.
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