Irak.- El Ejecutivo de Irak ordena la salida de los agentes de la firma de seguridad de EEUU Blackwater

Actualizado: martes, 18 septiembre 2007 0:17

BAGDAD, 17 Sep. (EP/AP) -

El Ejecutivo iraquí ordenó hoy la salida de los agentes de la firma de seguridad privada estadounidense Blackwater USA que, entre otros, proporciona seguridad a los diplomáticos norteamericanos en Irak, después de que ocho civiles iraquíes fallecieran ayer en el tiroteo que siguió a la explosión de una bomba dirigida contra un convoy del Departamento de Estado norteamericano.

Antes de conocerse la orden --emitida por el Ministerio de Interior iraquí--, la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, trasladó al primer ministro, Nuri al Maliki, en una conversación telefónica que Washington ha abierto una investigación de las muertes de los ocho civiles, acaecidas ayer en el oeste de Bagdad.

El portavoz del Ministerio de Interior iraquí, Abdul Karim Jalaf, explicó que ocho civiles perecieron y otros 13 resultaron heridos, después de que contratistas --que presuntamente trabajaba para la firma Blackwater USA-- abriera fuego contra los civiles en el barrio de mayoría suní de Mansur.

"Hemos cancelado la licencia de Blackwater y les hemos prohibido que trabajen en todo el territorio iraquí", explicó el portavoz, al tiempo que explicó que "trasferirán a aquellos implicados (en los asesinatos de civiles) a las autoridades judiciales iraquíes".

Justificó la decisión después de que testigos señalaran la implicación de Backwater en el incidente, y subrayó que el tiroteo que siguió a la explosión está siendo investigado. Según explicó un testigo, Hussein Abdul Abbas, un tiroteo se prolongó durante unos 20 minutos después de la deflagración.

Según explicaron fuentes oficiales estadounidenses, el convoy estadounidense que viajaba por la plaza Nisoor, de regreso a la Zona Verde de Bagdad, fue atacado con un coche bomba. Asimismo, explicaron que uno de los vehículos que formaba parte del convoy resultó dañado por armas de fuego pero no se produjeron heridos estadounidenses.

Sin embargo, dichas fuentes rechazaron confirmar si tienen constancia de víctimas iraquíes ni si agentes de Blackwater estuvieron implicados en el tiroteo posterior a la deflagración. Tampoco aclararon la cobertura legal con la que opera la firma de seguridad en Irak o si Blackwater va a cumplir la orden de expulsión.

BLACKWATER, CONOCIDO POR SER AGRESIVO

"Los chicos de Blackwater no son idiotas. Si están disparando a personas es porque sienten que es el comienzo de una emboscada", aseguró por su parte Robert Young Pelton, analista militar independiente, quien no obstante reconoció que sus agentes "son conocidos por ser muy agresivos" y por "utilizar sus metralletas como el claxon de un coche, pero su objetivo --aseguró-- no es matar a gente".

Mientras Al Maliki condenó a última hora de ayer el tiroteo "de una empresa de seguridad privada", el cual calificó de "crimen", el ministro de Defensa, Abdul Qadir al Obaidi, reconoció a la televisión iraquí que "estos criminales", responsables de las muertes de civiles, "deben ser castigados" y adelantó que el Gobierno de Bagdad exigirá una compensación para las familias de las víctimas.

Sin embargo, el portavoz del Gobierno, Ali al Dabbagh, reconoció a la cadena de televisión Alhurra que los contratistas no pueden ser juzgados en tribunales iraquíes porque "algunos de ellos tienen inmunidad".

Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack, aseguró que Estados Unidos no ha recibido notificación del Ejecutivo iraquí de la revocación de la licencia de Blackwater, por lo que declinó anticipar la respuesta de Washington ni cómo puede afectar la medida a las actividades del Departamento en el país árabe. "En esencia, la Secretaría quiere garantizar que hacemos todo lo que podemos para impedir la pérdida de vidas inocentes", subrayó.

4.600 EN OPERACIONES DE COMBATE

En abril, el Departamento de Defensa cifró en 129.000 los contratistas --procedentes de distintas nacionalidades-- operativos en Irak. De ellos, unos 4.600 participan en operaciones de combate, entre ellas, labores de escolta a convoyes de suministro.

Blackwater, es una compañía privada, con sede en Carolina del Norte y dirigida por un antiguo comandante de la Marina SEAL. Está entre las compañías de seguridad privada más grandes del mundo, y emplea, sólo en Irak, a unos 1.000 contratistas.

Una orden emitida por la autoridad de ocupación estadounidense en 2004, extendida este año, estipula que los contratistas "no serán sujetos a la legislación y regulación iraquíes" en relación a sus contratos o en el ejercicio de sus competencias.

Muchos de los contratistas han sido acusados de disparar de forma indiscriminada contra tropas estadounidenses e iraquíes, además de civiles que se aproximaron en exceso a sus convoyes, fuertemente armados, pero ninguno ha sido procesado formalmente.

La pasada Nochebuena, un empleado ebrio de Blackwater USA abatió a un guardaespaldas del vicepresidente iraquí, según fuentes oficiales estadounidenses e iraquíes. El agresor fue devuelto a Estados Unidos, con la ayuda de otros empleados de la firma privada y la Embajada estadounidense, aunque fue despedido de la compañía. Según su portavoz, Anne Tyrrell, el ex empleado de Blackwater está cooperando con la investigación judicial de los hechos.