BAGDAD, (EP/AP)
El Gobierno iraquí abrió hoy una investigación sobre la incursión que realizaron tropas británicas e iraquíes en un centro de la Policía de Inteligencia iraquí en el sur del país, y en la que encontraron a un presunto líder de un escuadrón de la muerte y a 30 personas retenidas con signos de tortura, según informó el Ejército británicos.
La incursión tuvo lugar ayer en el edificio de la Agencia Nacional de Inteligencia Iraquí, en Basora, al sureste de Bagdad. Dentro, las tropas encontraron a 30 prisioneros, incluyendo a una mujer y a dos niños, con signos de abuso y tortura, según el comunicado, aunque no se aportaron más detalles.
El presunto líder de un escuadrón de la muerte fue capturado con otros supuestos milicianos, según indicó un portavoz del Ejército británico, el mayor David Gell, quien añadió que éstos son "sospechosos de distintas actividades criminales, incluyendo secuestro, rapto, asesinato y participación en ataques bombas contra fuerzas internacionales y civiles". Permanece confuso si los sospechosos trabajaron en la agencia de Inteligencia o sólo se habían refugiado allí.
El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, ordenó una investigación sobre la redada para encontrar a "aquellos que han llevado a cabo ese acto ilegal e irresponsable", expresó un comunicado a última hora del domingo. Los prisioneros no fueron liberados intencionadamanente, sino que escaparon después de la operación de las fuerzas iraquíes y británicas.
