BAGDAD 23 Feb. (EP/AP) -
Distintos grupos de la insurgencia suní, entre los que se encuentra Al Qaeda, han anunciado que se vengarán por las supuestas violaciones que han denunciado esta semana dos mujeres suníes por parte de las fuerzas de seguridad iraquíes, cuyo personal es mayoritariamente chíi.
El pasado domingo, una joven de 20 años denunció que agentes de la Policía la violaron en una comisaría de Bagdad mientras se encontraba bajo custodia policial. Ayer se produjo otra denuncia emitida por una mujer de 50 años, quien aseguró haber sido agredida sexualmente por miembros del Ejército iraquí el pasado 8 de febrero en su domicilio, en la ciudad de Tal Afar, en el norte del país.
Desde entonces, al menos seis grupos insurgentes han exigido venganza, según una información suministrada por el centro de estudios estadounidense IntelCenter. Estos incidentes ejercen más presión sobre el Gobierno del primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, y las fuerzas de seguridad del país. Fuentes gubernamentales denuncian que estas supuestas violaciones forman parte de un complot suní para minar la legitimidad del Ejecutivo.
El líder de Al Qaeda en Irak, Abu Hamza al Muhayir, también conocido como Abu Ayyub al Masri, pidió a sus seguidores ayer que ataquen a las fuerzas de seguridad iraquíes para vengar estas agresiones. Al Masri añadió que 300 seguidores de su causa se habían prestado voluntarios para cometer ataques suicidas desde que saltó a la luz la noticia de la supuesta violación en Bagdad. Estas declaraciones se recogen en una grabación de audio y no puede asegurarse completamente que pertenezcan a Al Masri, aunque sí parece que sea su voz y fue difundida en webs que habitualmente usan grupos rebeldes.