BAGDAD, 29 Nov. (EP/AP) -
Más de 40 personas han muerto como consecuencia de distintas operaciones militares y ataques de los insurgentes que se han producido en distintos puntos del país en las últimas horas, según han declarado fuentes del Ejército estadounidense y de la Policía iraquí.
Uno de los focos más importantes de violencia ha sido el norte de Bagdad, donde fuerzas estadounidenses han llevado a cabo una incursión militar para reducir a los rebeldes. Dicha incursión, llevada a cabo a las diez de la mañana, ha dejado un saldo de 24 muertes, de ellos trece insurgentes, seis policías y cinco civiles, dos de ellos mujeres. Estas cifras elevan a seis las mujeres muertas más un niño los abatidos en los dos últimos días con motivo de las incursiones americanas en el norte de Bagdad, donde prácticamente todos los comercios permanecen cerrados y las calles desiertas.
Por otra parte, en Baquba, capital de la provincia de Diyala, a 60 kilómetros al noroeste de Bagdad, fuerzas aéreas norteamericanas han acabado con la vida de ocho miembros de la red terrorista Al Qaeda, además de dos mujeres civiles, según militares del Ejército estadounidense. Sin embargo, no se han producido bajas norteamericanas.
También en Baquba esta mañana se ha producido otro ataque, esta vez de la insurgencia a la oficina central de la Policía. Los agentes respondieron y causaron la baja de cinco de los atacantes, según declararon miembros del Cuerpo.
En Samarra, en la provincia de Salahuddin, al oeste de Diyala, un suicida explotó el coche bomba que conducía frente a la comisaría mientras que otros insurgentes de forma coordinaba dispararon con pistolas y lanzagranadas, causando la muerte de cuatro policías y cuatro heridos. En la misma provincia, en el ataque a un puesto de control murieron dos policías y resultando heridos otros dos, según informaciones del capitán de policía Laith Mohammed.
Tropas estadounidenses se han enfrentado hoy contra supuestos miembros de la insurgencia en Ramadi, capital de la provincia de Anbar, lo que ha causado la muerte de seis iraquíes civiles, de los cuales uno era un niño. Este hecho se produjo cuando soldados norteameicanos dieron el alto a dos hombres sospechosos de manipular un coche bomba que los soldados hallaron. Los dos iraquíes desobedecieron la orden de los militares y se refugiaron en el tejado de un edificio civil. Los soldados iraquíes abrieron fuego contra el mismo, el cual estaba habitado y después se encontraron los seis cuerpos sin vida.
A las 7:45 de hoy hizo explosión una bomba junto a una furgoneta de la policía que se encontraba muy cerca de un centro comercial de la capital del país, matando a tres civiles e hiriendo a otros once, incluyendo a dos policías y un niño.
Por último, dos morteros cayeron cerca del Ministerio de Sanidad, hiriendo a dos transeúntes.
