MADRID 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Policía fronteriza iraquí ha puesto en marcha "medidas de seguridad estrictas" en la frontera con Siria en los puestos fronterizos de Tenef y Walid, ubicados en la provincia de Anbar (oeste), para evitar la infiltración de hombres armados, según ha informado la agencia iraquí de noticias NINA.
En las últimas semanas, el Gobierno iraquí ha visto con creciente preocupación la expansión del conflicto en Siria a través de la frontera con varios enfrentamientos armados, así como el refuerzo del Estado Islámico de Irak, la rama de Al Qaeda en el país.
Una de las principales preocupaciones derivadas del conflicto en Siria para Bagdad es la presencia en el país del Frente al Nusra, una organización vinculada con Al Qaeda que ya ha sido incluida por Estados Unidos en su lista de organizaciones terroristas.
Washington denunció en octubre que denunció que esta organización está intentando "secuestrar" la rebelión contra el Gobierno de Al Assad en favor de los intereses de Al Qaeda en Irak (AQI).
En febrero, el ministro de Transportes iraquí, Hadi al Amiri, manifestó que el supuesto apoyo prestado por los gobiernos de Turquía y Qatar a grupos salafistas que combaten contra las fuerzas del presidente sirio, Bashar al Assad, supone "una declaración de acción armada contra Irak".
"Esas armas llegarán a los pechos iraquíes. Usar las milicias es un gran error. Si nosotros (los chiíes) formamos milicias y ellos (los suníes) forman milicias, Irak estará perdido", manifestó Al Amiri.
A principios de marzo, AQI ejecutó un ataque armado contra un convoy en Anbar en el que murieron al menos 40 militares y funcionarios sirios y varios soldados iraquíes. Menos de 24 horas después del ataque, el Ejército iraquí lanzó un "ataque a gran escala" contra posiciones de la organización terrorista en la provincia.
La semana pasada, al menos 25 personas murieron en una serie de atentados registrados cerca de la Zona Verde de Bagdad, un sector fuertemente protegido de la capital iraquí que alberga embajadas y edificios institucionales. La autoría de los ataques fue reclamada posteriormente por AQI.
EL FRENTE AL NUSRA Y AQI
El Frente al Nusra nació en 2011, al calor de las protestas contra el presidente sirio y se manifestó por primera vez el 23 de enero de 2012 a través de un comunicado del que entonces era su líder, Abu Mohamed al Julani, en el que hizo un llamamiento a la "guerra santa" contra el Gobierno sirio.
Desde mediados de diciembre está liderado por el jordano Mustafá Abdelatif Salé, cuñado del fallecido jefe y fundador de AQI, Abu Musab Zarqawi, que murió en 2006 en un ataque ejecutado por un avión estadounidense.
En febrero, el Estado Islámico de Irak llamó a levantarse en armas contra el Gobierno de Nuri al Maliki a la población suní de Anbar --la provincia más grande del país y con fronteras con Jordania, Siria y Arabia Saudí-- y, por extensión, del resto del país.
Precisamente la provincia de Anbar ha sido el foco de numerosas manifestaciones protagonizadas por suníes en las últimas semanas en protesta por lo que consideran discriminación del Gobierno contra su comunidad.
Desde Irak se han infiltrado en Siria decenas de combatientes suníes y chiíes para combatir contra o del lado de las fuerzas de seguridad en el conflicto, incrementando los temores de que el mismo se pueda expandir más allá de las fronteras.
Naciones Unidas calcula que desde marzo de 2011, cuando comenzó el levantamiento popular contra el Gobierno de Bashar al Assad, unas 70.000 personas han muerto a causa de los combates entre las fuerzas gubernamentales y rebeldes.
El Gobierno atribuye gran parte de las víctimas a los grupos terroristas que actúan en el país árabe --según ha denunciado insistentemente-- con la financiación y el apoyo material de Arabia Saudí, Qatar y Turquía, entre otros.