MOSCU, 21 Abr. (EP/AP) - Rusia reiteró hoy sus diferencias con Estados Unidos sobre la crisis nuclear iraní, insistiendo en que no se puede hablar de sanciones a menos que se demuestre que los fines del programa nuclear de Teherán no son exclusivamente pacíficos.
"Uno puede hablar de sanciones sólo después de la aparición de hechos concretos que demuestren que Irán no está comprometida exclusivamente en actividades nucleares pacíficas", señaló el portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Mijail Kaminin, citado por la agencia ITAR-Tass.
Las autoridades rusas habían afirmado previamente que estaban esperando el informe del 28 de abril del director de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Mohamed ElBaradei, antes de decidir la postura que adoptan respecto a los siguientes pasos a dar para resolver la crisis iraní.
Estados Unidos y Reino Unido consideran que si Irán no cumple con el plazo del 28 de abril dado por el Consejo de Seguridad para que cese el enriquecimiento de uranio, intentarán lograr una resolución que haga esta exigencia obligatoria.
La declaración de Kamynin se produce después de que Moscú rechazara ayer una petición de Washington de poner fin a la cooperación en la construcción de la central nuclear eléctrica de Bushehr, en el sur de Sudán. Kamynin había dicho ayer que la central no tiene ninguna relación con las actividades de enriquecimiento iraníes.
