JERUSALEN, 12 Abr. (EP/AP) -
El nuncio de la Santa Sede en Israel, monseñor Antonio Franco, anunció hoy que no asistirá a una ceremonia en memoria de las víctimas del Holocausto organizado por el Museo Yad Vashem debido a que dicho museo, que rinde tributo a las víctimas del régimen nazi, presenta negativamente la conducta mantenida por el entonces Papa Pío XII.
Monseñor Franco explicó que rechazará la invitación a participar en el acto anual en Yad Vashem mientras el museo siga mostrando imágenes de Pío XII acompañadas de grabaciones que afirman que reconoció al régimen nazi y no hizo nada para condenar su racismo, antisemitismo y el exterminio de judíos. "No pretendo ir a Yad Vashem si las cosas siguen como están", indicó.
Pío XII, que era Pontífice durante la guerra, ha sido criticado durante décadas por no hacer lo suficiente para salvar a judíos durante el Holocausto. El Vaticano ha insistido en que Pío XII llevó a cabo una diplomacia discreta para salvar a miles de judíos.
Al Día en Memoria del Holocausto asisten cada año todos los embajadores destacados en Israel o sus representantes. Según Yad Vashem, esta sería la primera vez que un emisario extranjero deliberadamente no acude a la ceremonia. "Estamos sorprendidos y molestos con el que delegado del Vaticano en Israel haya optado por no respetar la memoria del Holocausto y no participar en la ceremonia oficial en la que el Estado de Israel y el pueblo judío rinde memoria a las víctimas", señaló la portavoz del Museo, Iris Rosenberg.
En su carta remitida a Yad Vashem, monseñor Franco afirma que las imágenes de Pío XII son ofensivas para los católicos, al tiempo que expresa su respeto por "la memoria de los mártires del Holocausto pero también la memoria del Papa". "El derecho de unos no infringe el derecho del otro", concluyó.
