Actualizado: jueves, 9 julio 2015 8:41

MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Un ciudadano israelí lleva desaparecido casi diez meses después de entrar en la Franja de Gaza en septiembre de 2014, según ha informado el diario israelí 'Haaretz' después de que un tribunal levantara el secreto de sumario.

La familia del hombre, identificado como Avera Mengitsu, un etíope-israelí, se ha mostrado crítica con el Gobierno, asegurando que la situación se hubiera gestionado de forma diferente en caso de ser blanco.

Los servicios de Inteligencia de Israel habrían sido informados de que Mengitsu se encontraba en manos de las fuerzas de seguridad del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) tras cruzar la frontera, si bien su paradero actual es desconocido.

El citado diario ha apuntado que los intentos por parte de Israel para lograr información sobre este caso por parte de las autoridades gazacíes --gobernada 'de facto' por la formación islamistas-- han sido infructuosos.

Mengitsu, de 28 años de edad, residía en la localidad de Ascalón y entró en el enclave palestino a través de la playa de Zikim.'Haaretz' ha apuntado que sufrió problemas psicológicos y que podría haber estado bebiendo el día de su desaparición.

Un tribunal impuso una prohibición de publicar informaciones relacionadas con el caso en los medios locales, vetando incluso que se citaran informaciones publicadas en el extranjero.

La familia de Mengitsu no se ha pronunciado hasta la fecha a petición de las autoridades, si bien respaldó la petición de 'Haaretz' de poner fin al secreto de sumario.

DETECTADO POR EL EJÉRCITO

El día de la desaparición de Mengitsu, las cámaras de seguridad del Ejército israelí detectaron a un hombre acercándose a la valla de separación portando una mochila, lo que hizo sospechar de que se tratara de un palestino intentando regresar al enclave.

Pese a que los soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) desplegados en la zona se dirigieron al lugar, el hombre había conseguido saltar la valla para cuando llegaron. El hermano de Mengitsu, Yalo, ha dicho que Avera dejó la mochila en la playa con una copia de la Torá.

Tras el incidente, Israel contactó con la Cruz Roja y las autoridades de Gaza para informar de que un ciudadano israelí con problemas mentales había entrado en el enclave palestino, reclamando su vuelta a Israel.

DECLARACIONES DE LA FAMILIA

Por su parte, la familia ha asegurado que quería que la historia "se hiciera pública". "El día en que ocurrió, una persona del Shin Bet --la Agencia de Seguridad de Israel-- o la Policía me llamó y me dijo que mi hermano estaba en Gaza. Se lo dije a mis familiares, y así es como nos enteramos, pero nadie vino a vernos a casa", ha relatado Yalo.

Yalo ha asegurado que fue sólo después de contactar con la entonces parlamentaria de Yesh Atid Pnina Tamano-Shata a través de Facebook cuando la familia se reunió con representantes del Ejército.

"El comandante de la división para Gaza vino a vernos por primera vez dos semanas después de que contactara con Pnina. Nos dijo que sabían que mi hermano estaba en Gaza, y que había gente siguiéndole y que le traerían de vuelta, pero que no debíamos hablar de ello con nadie", ha apuntado.

Así, ha dicho estar "un millón por ciento seguro de que, si fuera blanco, no se hubiera dado esta situación". "Es algo más que racismo, lo llamo ser 'anti negro'", ha remachado Yalo.

Parlamentarios contactados por 'Haaretz' han afirmado que la desaparición de Mengitsu no ha sido discutida oficialmente en la Knesset.

Más noticias

Leer más acerca de: