Italia.- Los taxistas italianos continúan sus protestas ante la liberalización de las licencias prevista por el Gobierno

Actualizado: lunes, 3 julio 2006 14:53

ROMA, 3 Jul. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -

Los taxistas italianos continúan hoy sus protestas en las principales ciudades italianas, con manifestaciones y negándose a realizar servicios, ante la decisión del Gobierno italiano de liberalizar las licencias.

En muchas ciudades italianas, como Roma, Milán y Turín, los taxistas se han concentrado en varios puntos de la ciudad, así como en los aeropuertos, pero se niegan a realizar el servicio. La protesta se debe a la decisión del Gobierno de Romano Prodi de liberalizar el sector y permitir más fácilmente la compra de licencias. Además, el Ejecutivo permitirá que una persona pueda administrar tantos taxis como quiera, con empleados.

La medida se enmarca en un paquete económico que pretende corregir la deuda pública y que prevé además la liberación en otros sectores como el de las farmacias o la producción del pan.

En Roma, desde las ocho de la mañana el servicio taxis del aeropuerto no funciona, lo que ha provocado importantes problemas a los pasajeros, al igual que en el aeropuerto milanés de Linate y en la estación ferroviaria de Milano central, donde la protesta dura desde ayer.

En Turín, unos 140 taxis están bloqueando las rampas de acceso a las llegadas y las salidas del aeropuerto de Caselle, provocando el retraso de algunos aviones para permitir la llegada de algunos pasajeros que se encuentran bloqueados.

Mientras, todos los sindicatos del sector --Unica-Cgil, Cisl-Taxi, Ugl-Taxi, Ata-Casa, Ait y Cna-Fita-- han proclamado una huelga para el próximo 11 de julio. Los sindicatos señalan que "el proceso de liberalización, destinado a reestructurar el sector provocará daños incalculables económicos y a la cualidad".

Los sindicatos afirman que la normativa no hará mas competitiva las tarifas y apuntan que sería necesario que se liberalicen las tarifas como única medida para beneficiar a los clientes. Por su parte, el ministro de Desarrollo Económico, Pierluigi Bersani, insiste que la norma no es un verdadero proceso de liberalización y que "beneficiaría a los taxistas" y abrió a la posibilidad de un diálogo.