ROMA, 16 Feb. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -
El Tribunal de Apelación de Milán, que absolvió a tres islamistas, los marroquíes Mohamed Daki, Ali Toumn y Maher Bouyahia, de la acusación de terrorismo internacional, lo hizo considerando que el envío de voluntarios para luchar en Irak contra los soldados norteamericanos no se puede considerar una actividad terrorista, según las motivaciones de la sentencia que recoge hoy el diario 'Corriere della Sera'.
De esta manera, el 28 de noviembre pasado, el Tribunal de Apelación de Milán confirmaba la sentencia en primera instancia de la juez Clementina Forleo, que los declaraba "guerrilleros" y no terroristas y que causó una enorme polémica en Italia.
Según las motivaciones del veredicto, aunque probando la actividad de reclutamiento de voluntarios para luchar en Irak, "no se puede considerar bajo ningún aspecto como una actividad terrorista". En el caso de Daki, para los jueces "compartía las razones por las que un musulmán tiene que viajar a Irak a combatir" y las interceptaciones probaban "la disponibilidad de ayudar a un aspirante combatiente somalí" pero después, al darse cuenta de que la Policía le observaba no lo realizó por lo que "sólo estuvo ocasionalmente implicado".
En los otros dos casos, el Tribunal consideró que "de febrero a marzo del 2003 colaboraron con el egipcio Merai y el mulá Fouad (dos imanes de Milán y Parma arrestados por ser los líderes de una célula que ayudaba al reclutamiento) para ayudar a voluntarios musulmanes a ir a Irak para combatir contra los norteamericanos y les dieron documentos falsos".
En la sentencia se lee que "un acto puede sólo ser definido terrorista cuando en tiempo de paz determina un peligro directo para la población civil pero no en una situación de conflicto armado" por lo que se desestimó la tesis de la acusación en la que "las acciones suicidas siempre (y por sí mismas) son un peligro para la población civil".
Para el tribunal, de todas maneras se prueba que los voluntarios viajaban desde Europa a campos de entrenamiento de la organización Ansar Al Islam, considerada una "organización combatiente islámica" y con "tendencia de algunos al terrorismo" pero esto no probaría las acusaciones a los "reclutadores".
Con estas motivaciones, el Tribunal de Apelación milanés absolvió, tras 6 horas de reunión, a Daki de todas sus acusaciones mientras que a los otros dos imputados, confirmó sólo los delitos de incitación a la inmigración clandestina y documentos falsos, y reafirmó la condena de 3 años de reclusión.
