Karzai se muestra favorable a mantener debates electorales con sus contrincantes

Actualizado: jueves, 23 julio 2009 22:44


KABUL, 23 Jul. (Reuters/EP) -

El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, no ha descartado mantener un debate con los candidatos de la oposición antes de los próximos comicios presidenciales pero se retiró del debate televisado previsto para hoy porque había muy pocos aspirantes implicados, según informó hoy su oficina.

La oficina de campaña de Karzai rechazó las acusaciones de que el presidente, un claro líder en las encuestas de opinión, estaba asustado por debatir con los ministros de su anterior gobierno, Abdulá Abdulá y Ashraf Ghani, los únicos dos candidatos vistos como capaces de arrebatarle el puesto.

También dijo que Karzai se muestra a favor de mantener un debate pero rechazó tomar parte del previsto para hoy porque el presidente afirmó que no es justo ignorar a los otros 37 candidatos y que se debería permitir a todos los medios de comunicación cubrir estos eventos.

El debate de hoy, el primero de la campaña y con una duración de dos horas, está previsto que lo emita la televisión privada Tolo, pero después de la retirada de Karzai, Abdulá, ex ministro de Asuntos Exteriores, indicó que él tampoco asistiría. Sí se espera la presencia de Ghani, ex ministro de Economía y alto directivo en el Banco Mundial (BM).

"No le asusta nada (...), no le asusta enfrentarse a su gente", afirmó el portavoz de Ghani, Ajmal Abidy. "Karzai teme enfrentarse con una persona del mundo académico con experiencia internacional como Ghani (...), y si éste aparece en el último minuto de hoy, significaría que está jugando y que no es honesto con su pueblo", añadió.

Karzai ha dirigido Afganistán desde que los talibán fueran derrocados en 2001 por las fuerzas afganas, respaldadas por Estados Unidos, por no entregar a los líderes de la red terrorista Al Qaeda requeridos tras los ataques del 11-S. Ganó los primeros comicios, celebrados en 2004, y parece que va a retener el poder.

Pero el deterioro de la seguridad en Afganistán, especialmente en el sur, podría erosionar su liderazgo. También hay preocupaciones sobre la corrupción endémica y las bajas civiles causadas por los asaltos de las fuerzas extranjeras mientras intentan atrapar a los milicianos talibán.

Con la violencia este año en sus mayores niveles desde la expulsión de los talibán, miles de marines estadounidenses y soldados británicos han lanzado sendas ofensivas en Helmand, en el sur del país. Mientras, los talibán han calificado los comicios de farsa y han prometido aumentar sus ataques este año.