MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La organización internacional Acción contra el Hambre informó hoy de la delicada situación que se vive al norte de Kenia, donde la falta de alimentos nutrientes, la poca disponibilidad de agua y las duras condiciones que está soportando el ganado (principal fuente de sustento para gran parte de la población), están agravando aún más la situación de la zona.
Durante las últimas semanas, aumentó en un 29 % el número de niños, que ingresaron en los Centros de Nutrición Terapéutica de Acción contra el Hambre, presentando además cuadros de desnutrición más severas.
"La situación en Mandera ha pasado de ser grave a ser desastrosa", explicó Nelly Delaney, nutricionista de Acción contra el Hambre. La falta de infraestructuras y las duras condiciones medioambientales en esta región en el norte del país son los principales factores de la desnutrición crónica a la que tienen que hacer frente las poblaciones más vulnerables.
Según el coordinador de emergencias de Acción contra el Hambre-EEUU, Roger Persichino, las lluvias insuficiente en las tres últimas temporadas húmedas han agravado la situación de los más vulnerables, diezmando el ganado con el que cuentan para sobrevivir las poblaciones que practican una ganadería de subsistencia.
"Estas poblaciones dependen de sus animales para alimentarse, desplazarse y sobrevivir económicamente", explicó Roger Persichino. "Un animal que muere acentúa la vulnerabilidad de los hogares, privándoles de uno de sus principales recursos económicos. Esto implica también menos leche para los niños y, consecuentemente, un aumento de la desnutrición y de la mortalidad", prosiguió.
La organización hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que apoye con más firmeza a esta población y se refuerze la distribución general de alimentos, el apoyo al ganado, así como al sistema de salud local y la rehabilitación de infraestructuras de agua y saneamiento.
